Galicia y Vigo vuelven a tomar protagonismo en Madrid. Si hace unas semanas los seguidores del Celta proclamaban en el Santiago Bernabéu aquello de "menos Robinho e máis Albariño", ahora los aficionados de la ciudad y también del resto de la comunidad se reparten por las calles de la capital para animar a los tres corredores gallegos que compiten hoy en la prueba reina del Mundial de Ciclismo.

Los ciclistas del área de Vigo Óscar Pereiro y Marcos Serrano y el compostelano David Blanco recibirán el apoyo de una afición que en nada envidia el despliegue de los seguidores de Petacchi o de Boonen. De hecho, los aficionados vigueses ya han escrito sus nombres en los repechos más complicados.

Marcos Serrano

El ciclista de Chapela Marcos Serrano destaca la dificultad que tiene el circuito madrileño: "Su mayor dureza son las siete horas en las que no puedes quitar las manos de la bici, es muy rápido y, a veces, estrecho para los 200 ciclistas". Serrano, Pereiro y Blanco recibieron ayer el apoyo del director xeral para o Deporte de la Xunta de Galicia, Santiago Domínguez Olveira. En un rápido encuentro, hablaron del futuro equipo profesional de Galicia.