Ha tenido que pasar casi un año para que los percebeiros de Cangas pudiesen regresar a uno de sus lugares más especiales: el islote de Agoeiro, al sur de Cíes. Es uno de los sitios que se reservan para fechas concretas, como el caso de Navidad, debido a la excepcional calidad del marisco. Una calidad que ayer saltaba a la vista en las bandejas colocadas para la subasta, con un marisco de gran tamaño y cargado de carne. El lote más caro se vendió a 112,5 euros, que fue adquirido por los propios percebeiros para la comercializadora Makro. El resto, en su inmensa mayoría, se cotizó entre los 108 y los 110 euros. "Quizás se podía esperar un poco más, que estuviese entre los 120 y los 130 euros, pero en estas fechas es difícil", explicaba el presidente de los percebeiros, Nando Mariño. "Este mismo percebe en navidades superaba sin problema los 200 euros el kilo", aseguraban otros percebeiros.

El problema es que las condiciones meteorológicas y del mar les impidieron acercarse al islote de Agoeiro durante el mes de diciembre. "Intentamos acercarnos varias veces, pero era imposible. Lo primero es la seguridad", explicaban. Lo volvieron a intentar de cara a San Valentín y para el Día de la Madre, pero el mar se mostró infranqueable.

La jornada se saldó con 220 kilos de percebe, de los que 190 era marisco grande y los 30 kilos restantes mediano.