Tim Hemmings, ministro consejero de la embajada de Reino Unido en España, se encuentra estos días en Vigo para participar en el congreso de la Federación Española de Asociaciones de Transitarios en la ciudad olívica. Su agenda está marcada por el cómo se reconfigurarán las relaciones de Reino Unido con el resto de Estados miembros después de su salida de la Unión Europea. Hemmings se muestra esperanzado de que la desconexión no rompa los vínculos tejidos durante más de sus cuatro décadas de pertenencia al bloque económico. Un mensaje tranquilizador que ha transmitido durante sus encuentros tanto al alcalde de Vigo, Abel Caballero, como a la conselleira do Mar, Rosa Quintana,
-¿En qué fase se encuentran ahora mismo las negociaciones del 'Brexit'?
-Nos encontramos todavía en proceso de debate a la espera de poder pactar las condiciones de la salida. En todo caso, lo importante es que vamos a salir de la Unión Europea, que será un elemento de incertidumbre, pero lo que buscamos es una asociación económica singular y ambiciosa. Para el comercio y la pesca también. Ya veremos la respuesta de Bruselas y de los otros Estados miembros, pero es muy importante recalcar esta idea de tranquilidad, tal y como hizo la primera ministra, Theresa May, hoy [por ayer].
-Menciona la pesca. ¿Qué importancia tendrá en las negociaciones del 'Brexit'?.
-Es una de las prioridades en el acuerdo. Sabemos que la pesca es algo muy importante aquí en Galicia y también en Gran Bretaña, cobra una especial relevancia por el hecho de tratarse de una isla. Vamos a salir de la Política Común de Pesca, pero estoy aquí para lanzar un mensaje de tranquilidad, porque no buscamos cambios grandes en este apartado. Somos conscientes de que las negociaciones van a ser muy largas, pero en todo caso nosotros no estamos buscando por ejemplo aranceles ni grandes cambios en esta materia respecto a la situación actual.
-¿Las condiciones de acceso a las aguas se determinarán mediante acuerdos bilaterales o se intentará buscar un acuerdo para el conjunto de los Estados miembros de la Unión Europea?
-No podría dar una respuesta concreta todavía porque es algo que aún estamos trabajando de cara a las negociaciones futuras. Actualmente estamos explorando las vías para la salida de la Unión Europea y esperamos comenzar las negociaciones futuras en octubre o noviembre. En todo caso, nuestra postura no es para crear fronteras donde no existen ni para crear aranceles. Además, somos conscientes de que la pesca es una industria que necesita mucho apoyo.
-Existe cierta controversia sobre si se aplicarán las mismas condiciones también a las aguas de las Islas Malvinas. ¿Cuál es el criterio que se seguirá durante las negociaciones?
-Nuestra salida de la UE va a terminar con nuestra participación en la Política Común de Pesca y también sobre los acuerdos con países terceros. No va a implicar llevar a cabo relaciones bilaterales con otros países. La situación con las Islas Malvinas todavía está en fase de estudio porque se trata de una realidad diferente al no formar parte de la Unión Europea.
-Otro de los aspectos que gira en torno a este tema es la posibilidad de que se terminen fijando aranceles a las exportaciones de productos pesqueros. ¿Cómo se materializarán finalmente?
-Tenemos claro el compromiso de seguir apostando por el libre comercio y nuesta idea es que no queremos que se apliquen más aranceles.
-El modelo que persiguen en materia de comercio, ¿será mediante acuerdos bilaterales o un estatus similar al de Noruega o Suiza?
-Ni el uno ni el otro. Buscamos un acuerdo tipo Reino Unido, porque nuestras relaciones con la Unión Europea son diferentes. Somos un gran país con una gran economía y también nuestra contribución a la defensa y el desarrollo son muy importantes. Vamos a buscar una solución que no recorte vínculos ya establecidos ni para los españoles y europeos en mi país ni para los británicos que están en España. Es evidente que hay algunas cosas que van a cambiar, pero lo que buscamos es que haya los menores cambios posibles.
