Cuando que España entró en la Comunidad Económica Europea (CEE) operaba en Gran Sol la ya legendaria flota de los 300. Quedan 84. Al sector le tocó conformarse con el 7% de todos los cupos de pesca de los Estados miembro (en virtud del criterio de estabilidad relativa, de 1986), y es el mismo porcentaje de cuotas que tiene hoy. La escasez de posibilidades de pesca ha provocado el desguace masivo de barcos, que la flota gallega sea una de las menos rentables de la Unión Europea, que países como Irlanda utilicen sus cupos para arrebatar a Vigo las descargas de Gran Sol (como ha publicado FARO en las últimas semanas) y el éxodo de barcos a otros países que sí tienen cuotas disponibles para ofrecer. En solo diez años el puerto vigués perdió 17 efectivos por esta última razón. Con un rendimiento medio de 1,5 millones de euros por buque (palangreros y arrastreros), desde 2007 se evaporaron casi 26 millones de euros del puerto vigués y más de 200 empleos directos.
La mayor parte de estos pesqueros deslocalizados, once, visten ahora bandera francesa, país que cuenta con el 11% de la capacidad pesquera de toda la UE, y el 10% de los derechos de pesca. A Francia le sobran cada año casi 4.000 toneladas de rape, volumen que alcanzaría un valor en primera venta de más de veinte millones de euros. Es una especie de elevado valor comercial por la que pugna la flota de Vigo (en régimen de alquiler); pero los franceses no la arriendan, la Comisión Europea no promueve su utilización y el Gobierno central tiene en el cajón la modificación de una orden ministerial que posibilitaría el alquiler. "Es como si vas a una fiesta y te sobra comida, te la pido porque la vas a tirar pero me dices que no. Aquí es lo mismo, las cuotas no se acumulan de un año para otro. Se tiran", ilustra el director gerente de la Cooperativa de Armadores de Vigo (ARVI), José Antonio Suárez-Llanos.
De los 17 buques que se abanderaron en otros Estados, otros cuatro marcharon a Reino Unido. Tiene el doble de derechos de pesca que la flota española pese a disponer de la mitad de capacidad por el criterio de reparto de 1986. Solo en el año 2015 desaprovecharon más de 7.000 toneladas de solla, que habrían alcanzado un valor superior a los 28,5 millones de euros en los pósitos gallegos. El último de los barcos que marcharon de Vigo recaló en Irlanda, que diseña un plan para construir una lonja con la que seducir al resto de buques de Gran Sol que descargan a día de hoy en la dársena de O Berbés. . "Tendremos que esforzarnos por hacer ver a las autoridades pesqueras que lo poco que queda debemos mantenerlo, por empleo, por mantenimiento de la riqueza en las zonas costeras y por razones estratégicas de aportación de pescado al mercado", apostillan desde la cooperativa de armadores.
De momento el Ministerio de Agricultura y Pesca (Mapama) tiene pendiente la reforma de la orden ministerial, si bien en ARVI creen que el debate es profundo y debería darse en el seno de Bruselas. "No puede ser que se tiren tantas cuotas cuando a nosotros nos hacen falta", lamenta el gerente. Porque, según la información oficial de la propia Comisión, a la que ha tenido acceso FARO, sí se producen alquileres de derechos de pesca en Europa, y remunerados. Solo en 2015 Holanda, Dinamarca y Reino Unido ingresaron casi 70 millones por este concepto.
