La flota gallega que opera en el caladero de Mauritania confía en poder incrementar sus posibilidades de pesca en el caladero después de las negociaciones que se celebrarán entre el país africano y la UE, ya que la próxima semana se celebrará la Comisión Mixta en Bruselas. Responsables de la patronal pesquera se reunieron ayer en la capital comunitaria para preparar el encuentro con el fin de "mejorar en el protocolo" pesquero.
"Tenemos que ver si podemos incrementarlas (por las cuotas), sobre todo para la merluza", expuso a FARO Juan Carlos Martín Fragueiro, director gerente de la Asociación de Armadores de Buques de Pesca de Marín. Las posibilidades de pesca para esta especie están fijadas en 3.500 toneladas con el actual convenio, lo que da a los buques congeladores doce mareas al año (cada una es de veinte días, aproximadamente). Para el sector es posible alcanzar este objetivo "si se quiere y hay voluntad".
La mayor parte de las mejoras que se plantearán en la Comisión Mixta son de carácter técnico y operativo para la flota, compuesta por arrastreros congeladores, fresqueros, palangreros y cañeros (sobre todo del País Vasco). El pacto con Mauritania permitió el regreso a sus aguas de cefalopoderos tras su expulsión en el año 2012. El pacto concedió 1.400 toneladas de calamar y 600 de choco, además de un 25% adicional de posibilidades de pesca para especies demersales.
