Ecuador demandará a la empresa propietaria del barco chino Fu yuan yu leng 999 por los daños causados a la reserva marina de las Islas Galápagos, después de que el pasado 15 de agosto fuesen halladas 300 toneladas de especies protegidas en el interior de sus bodegas. En concreto, el Parque Nacional de las Islas Galápagos, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente del país sudamericano exigirá a la firma china el abono de 36.800 millones de dólares (unos 30.800 millones de euros al tipo de cambio actual).

El daño ha sido calculado en base al impacto a largo plazo por la pérdida de biodiversidad y daño al medioambiente, así como por faenar dentro de la reserva. La cuantía de la indemnización es superior a la generación de riqueza de buena parte de los países del sur del globo. En el caso de Ecuador, de percibir la cantidad exigida, su Producto Interior Bruto (PIB) recibiría un importante empujón. En el año 2016 este se situó en los 97.800 millones de dólares, por lo que, de recibir la indemnización, lo elevaría del 37,6%.

La ministra del Consejo de Gobierno del Régimen Especial de Galápagos, Lorena Tapia, explicó que aunque faenan en alta mar, el daño que ocasionan es importante porque las especies "no conocen fronteras" y cruzan las líneas internacionales, por lo que la pesca masiva cerca de Galápagos afecta a la biodiversidad en las islas y de la reserva. "La legislación ecuatoriana prescribe un delito medioambiental castigado con hasta 3 años de cárcel y la reparación del daño causado", resaltó Tapia.