El Ministerio de Agricultura y Pesca incorpora un avión y un helicóptero al operativo de inspección de la pesquería de bonito del norte (o atún blanco) tras las denuncias de parte de la flota, que aseguraba haber localizado boniteros franceses con el AIS (Sistema de Identificación Automático) apagado mientras faenaban a menos de doce millas de la costa de España (aguas de competencia nacional) y tras las críticas del sector español al uso de las artes de arrastre pelágicas.

Los dos aparatos de la Secretaría General de Pesca operarán con tripulación de la Guardia Civil -que también contribuye con otro helicóptero de apoyo- a lo largo de la costa cantábrica durante esta semana. La vigilancia mediante medios aéreos y marítimos permitirán un mejor seguimiento de la actividad de los buques sin ser vistos y facilitarán las inspecciones a bordo para comprobar si los descartes se incluyeron en el diario de a bordo de los barcos. Estas tareas se complementan con la inspección en puerto de los desembarques de las mercancías para comprobar que cumplen con todos los requisitos legales.

Por otro lado, la patrullera de altura Alborán salió ayer desde su base en el Arsenal de Cartagena para participar en la Campaña NAFO (Northwest Atlantic Fisheries Organization) en colaboración con Pesca durante los próximos dos meses.