La flota española alerta que al menos cinco buques boniteros de bandera francesa (alguno, según fuentes del sector, de capital nacional) fueron localizados con el AIS -Sistema de Identificación Automática- apagado mientras faenaban en aguas de competencia española, concretamente a menos de 12 millas de la costa asturiana.

El avistamiento de estos boniteros de pabellón galo sembró la alarma en el caladero nacional Cantábrico Noroeste, en el que pesca la flota bonitera de Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco, además de hacerlo otros segmentos de la pesca de bajura. La presencia de estos barcos movilizó a la flota asturiana, que puso el hecho en conocimiento de la Secretaría General de Pesca sin que, hasta el momento, la denuncia surtiese efecto.

Fuentes del sector asegura que los cinco barcos, además de pescar de forma ilegal, venden sus capturas en las lonjas españolas, lo que genera tensión en los barcos nacionales que ya comienzan a notar un descenso de los precios que, hasta ahora, eran aceptables. La especie se comercializó a entre 5 euros por kilo y 5,50 euros por kilo, cantidad que ya descendió alrededor de un euro o más desde la aparición de los pesqueros franceses.