Los barcos de artes menores de la provincia de Pontevedra que se dedican a la pesca dirigida se ven obligados a participar a partir del lunes en la campaña de xarda -o caballa- en el Cantábrico pese a que no les resultará rentable. Lo hacen, dicen, para mantener la cuota de cara a los próximos años, con la esperanza de que la situación que viven en la actualidad no se vuelva a repetir. Tras la división de la cuota gallega por provincias tras la escisión de Lugo primero y de A Coruña después, los barcos del sur de la comunidad tendrán que sobrevivir en el norte pescando "dos o tres días con suerte".
Desde la Federación de Cofradías de Pontevedra explican que la cuota de la que dispone la provincia estará finalmente dividida en un 50% para los que realizan pesca dirigida (con anzuelos exclusivamente para la caballa) y otro 50% para la pesca accidental (enmalle en aguas gallegas). Sin embargo, existe un compromiso verbal de que este porcentaje se amplíe si los patrones que van al Cantábrico envían informes diarios para ir controlando las capturas.
"Un compromiso verbal no sirve", lamenta Avelino Fernández, uno de los patrones que llevan más tiempo viajando al norte para participar en la costera, concretamente desde 1998. "Nos vemos obligados a ir, por el interés de mantener la cuota, pero va a ser una catástrofe. Vamos a pescar dos o tres días como mucho", explica el patrón, que el sábado partirá desde Baiona junto a otros para Gijón, lugar en la que varias de estas embarcaciones montarán su puesto base.
Allí también estará Julio Castro, patrón de Aldán, que se muestra más esperanzado y espera "por lo menos pescar los mismos cinco días que el año pasado". Su caso es particular, porque el año pasado realizó una inversión muy fuerte en preparar el barco y finalmente la campaña fue un desastre, con lo que espera sacarle un mayor rendimiento este año.
Sin embargo, lo "más triste" de esta situación para Castro es algo que opinan la mayoría de los patrones: la separación de la cuota gallega. Los cerca de 100 barcos de estas características en Galicia que pescan xarda iban hasta este año de la mano. Ahora, Pontevedra, con una flota mayor que las otras dos provincias, se queda con un porcentaje menor a repartir: mientras en Lugo o A Coruña tienen el 85% para pescar dirigida y el 15% para accidental, aquí se apuesta por la división a partes iguales. Todo, pese a que los patrones apuntan que de esta forma la cuota no se va a consurmir.
