La Unión Europea y Guinea-Bisáu ya han iniciado las reuniones formales para la renovación del acuerdo pesquero. Desde el martes representantes de la UE y del país africano están en Bruselas negociando los términos de un nuevo protocolo del que dependen el 80% de las actuales capturas que realiza la flota cefalopodera de Marín a lo largo del año, además de las de otros barcos españoles. Hasta 12 barcos están ahora faenan en aguas de Guinea-Bisáu, cuyo acuerdo con la UE finaliza el próximo 23 de noviembre. "Es la primera ronda de contactos y para nosotros es muy importante por la dependencia que tenemos de este acuerdo", explica Juan Martín Fragueiro, gerente de la Asociación Nacional de Cefalopoderos (Anacef).

Mientras el nuevo acuerdo con Mauritania no entra en vigor (fueron expulsados en 2012 pero el pasado mes de noviembre llegaron a un acuerdo) y debido al paro biológico de abril y mayo en aguas de Marruecos, el caladero de Guinea-Bisáu se convierte estos meses en clave para la flota de Marín. Allí realizan la "típica pesquería mixta" de África, en la que los buques mixta capturan especies como merluza, sable, jurel... "Allí hay 12 barcos y se sumará uno más próximamente", indica Fragueiro.

Es por este motivo que la negociación del nuevo protocolo centra esta semana la atención de la asociación, que lo único que pide a la UE es que se exija un mantenimiento de las condiciones actuales que rigen el acuerdo. Rubricado entre las partes en febrero de 2012, fue suspendido por el Consejo tras el golpe militar que tuvo lugar en el país el 12 de abril de aquel mismo año. Tras la restauración del orden constitucional el 16 de octubre de 2014 el Consejo adoptó la decisión sobre la firma y la aplicación provisional del protocolo.

Con una contrapartida de 9,2 millones de euros anuales, los armadores están obligados a pagar un canon que varía en función del segmento de flota. En el caso de los cefalopoderos es en función de las toneladas de registro bruto (TRB) del buque, que parte de 256 euros. "Más o menos supone un millón de euros al año. Es una cantidad importante pero buscamos que al menos no aumente", concreta el gerente de Anacef, que recuerda que en la zona además de ellos solo faena "algún atunero" y marisqueros.

La esperanza de la asociación es que el acuerdo esté cerrado antes del verano para que de tiempo a pasar toda la tramitación necesaria antes de que llegue noviembre. La próxima negociación ya será en el país africano, para la cual Anacef estará en contacto directo para seguir de cerca los pormenores, que tendrá su parte más difícil a la hora de cerrar la contrapartida económica.