Con la salvedad de Conxemar, Anfaco y organizaciones de productores, el sector de transformación pesquera no promueve el asociacionismo como vía para ganar competitividad o defender sus intereses bajo una única voz. Y, más aún, son escasas las iniciativas de colaboración entre las empresas centradas en la extracción del producto con la elaboración y comercialización que sí proliferan en la automoción (con clústers o centrales de compras). Por este motivo la iniciativa Fishing Accelerator se presenta como una novedad no solo por tratarse de la primera aceleradora de proyectos pesqueros del mundo, sino también por ser pionera en ideas colaborativas. Sus promotores son firmas de primer nivel: Pescapuerta, Mascato, Orpagu y Opromar, a las que se suman Kaleido Tech e Inxenia Desarrollos Tecnológicos.

El objetivo es "identificar y atraer las mejores soluciones tecnológicas para el sector" con ideas de todo el mundo, lo que erigirá a las promotoras en "referentes" de innovación. Su intención es acompañar el desarrollo de startups o compañías que tengan la tecnología como su leitmotiv para aplicar su conocimiento a la pesca. "El programa anual buscará la verificación e incorporación de esas tecnologías a través de proyectos reales con las empresas", e incluye "una inmersión real en el mercado, incluyendo formación, pruebas piloto y desarrollo de negocio".

Es la propia dinámica del mercado, que crece a un ritmo del 5% anual, la que ha generado la necesidad de lanzar Fishing Accelerator. "La industria pesquera ha crecido de forma exponencial en los últimos años, pero no ha dejado de afrontar cambios muy relevantes debido a la legislación o por los nuevos hábitos de consumo. Esto ha obligado a las empresas punteras a apostar por la innovación para solucionar de forma efectiva y rápida los nuevos retos de la industria", añaden desde las compañías promotoras.

Aunque de inicio la Fishing Accelerator está integrada por las seis firmas mencionadas sus creadores llaman al resto del sector a integrarse en la iniciativa para hacerla más grande. El programa actuará como una especie de incubadora con tres fases, empezando por la definición de necesidades por parte de las empresas colaboradoras, la identificación de las tecnologías y la selección de las startups, y la puesta en marcha de proyecto pilotos reales. La aceleradora no recibe financiación pública.