El proyecto colaborativo "Fishboost", que la Unión Europea financió con seis millones de euros, desarrolló varias herramientas y técnicas para la selección genética de las seis principales especies de peces de la acuicultura europea, el salmón atlántico, trucha arco iris, dorada, lubina, rodaballo y carpa común. La aplicación de estas herramientas ayudará a reducir la mortalidad en las crías por enfermedad y a formar poblaciones base adecuadas para el cultivo. El proyecto comenzó en 2014 y terminará en enero 2019.