La patronal pesquera Cepesca se reunió ayer con el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación (MAEC) para solicitar su interverción para evitar el veto de las navieras a embarcar tiburón. El boicot, que comenzó en Hong Kong por la presión de la organización medioambientalista WWF, "está complicando en gran medida el desarrollo de la actividad de la flota de palangre de superficie y, específicamente, las exportaciones a mercados como, por ejemplo, el latinoamericano", según los armadores.
Desde Cepesca entienden que se trata de una "situación realmente injusta" por el hecho de que el palangre comunitario cumple "a rajatabla la política anti-finning de la UE (prohibición de cortar las aletas de los tiburones y tirar el cuerpo por la borda)". Mientras otras flotas sí realizan "tradicionalmente" esta práctica que buscan evitar las navieras con este veto, la flota gallega de este segmento sigue jugando con desventaja pese a los reiterados intentos de dar marcha atrás a este boicot.
"Es necesario distinguir entre las flotas que tienen como objeto de captura especies de tiburón que se encuentra en buen estado biológico, tales como la tintorera y el marrajo dientuso, en el caso de la flota gallega, y aquellas que pescan de forma ilegal y sin ningún control y que son, además, las que acostumbran a cercenar la aleta y tirar el cuerpo de los escualos por la borda", comentó el secretario general de Cepesca, Javier Garat.
Acuerdos
Por otro lado, el secretario de estado del MAEC, Ignacio Ybáñez, y el sector analizaron el estado de los 14 Acuerdos de Colaboración de Pesca Sostenible (SFPA) actualmente en vigor. Entienden que deben ser renegociados los acuerdos con Guinea-Bissau y Marruecos (importantes para la flota cefalopodera expulsada de Mauritania en 2012). Además, también identificaron como "prioritarios" la firma de nuevos acuerdos con Tanzania, Kenia, Guinea Ecuatorial y Guinea Conakry, y la necesidad de resolver los problemas con Gabón.
Cepesca también pidió a Ybáñez "desarrollar acciones, a través de las embajadas, que contribuyan a que los países con los que existen acuerdos mantengan posiciones de consenso con la UE en las Organizaciones Regionales de Pesca (ORP)". Con esto se quiere evitar quer las propuestas europeas "se vean fortalecidas y no se encuentren con escollos en las reuniones decisorias de estos órganos".
Portugal
Por otro lado, la flota de Punta del Moral (Andalucía), presente en la reunión, solicitó la intermediación del MAEC para conseguir "una delimitación marítima adecuada" entre España y Portugal en la zona del Golfo de Cádiz. "Hoy en día, la que se aplica en la práctica, que fue unilateralmente decidida por Portugal, perjudica los intereses de los pescadores españoles. En este sentido, los armadores españoles están dispuestos a admitir que la zona de conflicto sea compartida entre ambos países", informaron desde Cepesca.
