Mozambique, país africano en el que operan Pescanova (con 32 buques) y otras firmas gallegas, sufre pérdidas de 57 millones de dólares (unos 54 millones de euros al cambio actual) debido a la pesca ilegal y otras prácticas nocivas, incluyendo daños medioambientales.

Según Leonid Chimarizene, director de Operaciones en el Ministerio del Mar, Aguas Interiores y Pesca de Mozambique, la costa del país es diferente de otros, ya que "permite que se hagan atraques en prácticamente cualquier parte". "Lo que significa que debemos fiscalizar a lo largo de la costa", indicó Chimarizene en declaraciones recogidas por el medio A Bola.

El director de Operaciones del Gobierno cree que este es uno de los "desafíos" que tienen para combatir la pesca ilegal, además de vigilar a los barcos de recreo que llegan de Sudáfrica, que "agravan el escenario de pesca ilícita".