Colombia, al igual que otros países sudamericanos, cuenta entre sus recursos con un tipo de almeja conocida como piangua (Anadara tuberculosa, Anadara similis). En Galicia, la gran tradición explotando bivalvos sitúa a la comunidad como un referente internacional. Es por este motivo que biólogos colombianos viajarán la próxima semana a Vigo para conocer de primera mano los secretos de la explotación de este recurso, buscando formarse con los especialistas locales a través de una iniciativa coordinada por el Centro Tecnológico del Mar, Cetmar, situado en Vigo. Además de las instalaciones de Bouzas, los expertos visitarán Campelo (Poio), el Instituto Galego de Formación en Acuicultura (Igafa) de A Illa de Arousa o la lonja de Cambados.

En concreto, serán dos los expertos de Colombia que se desplacen la próxima semana a la ciudad olívica. "Durante los dos primeros días estarán en el Cetmar, donde recibirán formación", explica Mercedes Martínez, responsable del departamento de cooperación internacional del centro. Los dos siguientes días harán trabajo de campo en la zona de Campelo, con las mariscadoras y también el asistente técnico de la cofradía, Andrés Simón. Ya el viernes será el turno de visitar la depuradora de Mariscos Veiro y la lonja de Cambados. Por último, la semana siguiente acudirán al Igafa, donde estarán con la profesora de moluscos, María del Carmen Andrés Rivas, y trabajarán en el minicriadero del instituto.

"Lo que buscan con esto es saber cómo hacemos los planes de explotación, formarse en temas de muestreo y demás. Luego ellos lo harán en su país para conseguir una propuesta de plan para la piangua", completa Martínez.

Este itinerario se enmarca en un proyecto de mayor calado cuyo objetivo es fortalecer la actividad de extracción, cultivo, obtención de semiente y condiciones higiénico-sanitarias requeridas para la comercialización del bivalvo en la gobernación colombiana de Nariño (al sur del país) y, más concretamente, en la alcaldía de Tumaco. "En total están afectadas unas 3.000 familias de forma directa y muchas más indirectamente", señala Martínez, que recuerda que si la idea tiene éxito se verá beneficiado todo el entorno.

Para ello, ya el próximo año tendrá lugar la primera experiencia piloto con la especie en suelo colombiano. "Allí se verán las comunidades que trabajan con la piangua, localizaremos la más adecuada para hacer la experiencia piloto y una tengamos los resultados se podrá ampliar a otras zonas", señala la experta del Cetmar. Los investigadores del centro de Bouzas elaborarán un informe del estado del arte y los muestreos durante e proceso de análisis de las capturas, los aspectos relacionados con la trazabilidad y comercialización, incluyendo también el control de calidad sanitaria y la generación de valor añadido.

En total, los trabajos se desenvolverán durante 15 meses entre este mes y el próximo año. Todo gracias al programa Desenvolvemento con Identidade Rexional entre España e Nariño (Direna), una alianza que pretender apoyar el proceso de desarrollo de esa gobernación colombiana.