Pescanova, Iberconsa, Mascato, Fandicosta, Profand, Marfrío, Interatlantic Fish y Vieirasa son las principales pesqueras gallegas implantadas en Argentina, Perú y Chile. Pero la industria transformadora al completo depende de la materia prima que proveen estos países, que ayer protagonizaron una de las ponencias del Congreso Mundial de los Cefalópodos, previo a Conxemar. Sus pesquerías de cefalópodos (pota, potón y pulpo) tienen en España su segundo mercado después de que China ocupase el primer lugar a partir de 2009. Con el recurso en horas bajas la presión de la flota extranjera espolea al sector, que denuncia una "competencia desleal" de buques de bandera china, surcoreana o taiwanesa.
En Argentina faenan a día de hoy 62 barcos poteros, de los que una docena pertenecen a firmas de capital gallego. Pero otros 260, el 81% del total, explotan la misma especie fuera de las 200 millas. "Nuestro desafío está fuera de la milla 200. Son buques que operan legalmente, pero con enormes ventajas competitivas", expuso el subsecretario de Pesca argentino, Tomás Gerpe. Los países que abanderan estos barcos ofrecen subsidios a la actividad pesquera y, como denunció, las condiciones de la mano de obra son peores. "Es difícil cuantificar el daño que hacen" a la pesquería, máximo teniendo en cuenta que, a más escasez del recurso, la "presión" de la flota extranjera aumenta.
La mayor parte de estos buques tienen bandera de China (unos 160), por hasta 35 de Corea del Sur, entre 15 y 25 de Taiwan y una quincena de España. Para Juan Redini, presidente de la Cámara de Poteros de Argentina (CAPA), la flota extranjera actúa "de forma desleal", con una estrategia de maximización de las capturas y "sin respetar las vedas" fijadas por el Ejecutivo y los investigadores. La denuncia de los ponentes no se centró en la flota china en particular, ya que los inversores chinos están apostando fuerte por la industria local (tienen 15 poteros con bandera argentina de su propiedad), son dueños de Altamare (exfilial de Pereira) y se harán con Conarpesa. El problema, a su juicio, es la ausencia de una política internacional conjunta.
Alejandro Daly, gerente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI) de Perú, defendió la instalación de un "sistema de control por satélite" a todos los barcos extranjeros. Una propuesta espinosa para Gerpe, que aprovechó la ocasión para atacar la "ocupación ilegal" de las Malvinas (o Falklands), lo que dificulta cualquier acuerdo en materia pesquera con Reino Unido. El ponente de Chile, Leonardo Sasso (jefe de Gabinete de la Subsecretaría de Pesca), expuso los avances del país en la pesquería de potón o jibia, muy reciente pero que dispone de un TAC (total admisible de capturas) de 200.000 toneladas al año.
Los ponentes hicieron hincapié en los graves efectos de El Niño, que redujeron entre un 40 y un 60% las capturas de cefalópodos en el Cono Sur. El fenómeno meteorológico afectó también a la pesquería de California, como destacó Joe Capuccio (Del Mar Seafoods), donde las capturas apenas superaron las 25.000 toneladas en lo que va de año, frente a una cuota anual establecida en 118.000.
Alejandro Daly - Sociedad Nacional de Industrias de Perú
"Es importante instaurar un sistema de control por satélite para la flota"
Tomás Gerpe - Subsecretario de Pesca de Argentina
"Cuando escasea la especie crece la presión de los barcos extranjeros"
Juan Redini - Presidente de CAPA (Argentina)
"La flota extranjera actúa de manera desleal, sin respetar las vedas"
