La producción de la acuicultura superará a la de la pesca salvaje a partir de 2021, según un informe de la FAO y la OCDE. Y la primera industria avanza a pasos agigantados con la implantación de filiales en países donde estas granjas son un producto exótico. Es el caso de Nigeria, donde la actividad pesquera tiene un peso importante en el PIB, del 5%, pero que acogerá su primera planta acuícola de camarón tigre negro. La iniciativa es de la compañía holandesa Primstar, que prevé empezar con la producción intensiva en septiembre de cara a empezar a vender en el cuarto timestre.

Según explicó su consejero delegado, Richard Oerlemans, al portal especializado Undercurrent News, la intención es la de producir 1.100 toneladas, nivel que esperan alcanzar en 2018. Primstar se centrará en ejemplares de mediano tamaño para su venta en el mercado europeo, aunque a largo plazo pretenden expandir el producto a Asia y Estados Unidos.

Primstar no es un desconocido en Nigeria, donde opera con la filial pesquera Atlantic Shrimpers, y tampoco lo es en España. Gambastar procesa desde Burgos el langostino salvaje que faena la flota de la matriz en el país africano, que distribuye en el país de manera exclusiva. El langostino, sobre todo el procedente de la acuicultura es, junto con el atún y el salmón, uno de los principales productos de consumo en el mundo.