La flota de litoral encontró en los últimos días muchas dificultades para faenar debido al fuerte viento de nordés, que impidió a los barcos alejarse de la costa en el norte de la comunidad. "El viento es terrible y tenemos que estar muy pegados a tierra, salir a mar abierto es imposible", lamentaba ayer el portavoz de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (Acerga), Andrés García, que indicó que esta situación no permite al sector salir a buscar los bancos de especies como la anchoa, "desaparecida" en las últimas dos semanas en aguas gallegas tras su aparición a finales de julio. "Recientemente se encontró algo de bocarte por la zona de Avilés, pero aquí nada", explicó García.
Mientras, en otras zonas del norte de la comunidad, como A Mariña lucense, la meteorología sí permitió a la flota salir a faenar con normalidad. "Aquí se trabajó y se subastó como de costumbre", asegura el gerente de Armadores de Burela SA (ABSA), Miguel Neira. Así sucedió también en las Rías Baixas, donde el viento será hoy casi inexistente.
