La condena ha difuminado el "miedo" a entrar en prisión pero no ha apagado las ganas de reivindicar más cuotas que, aseguran, era lo mismo que pedían el 6 de marzo de 2014. Ese día centenares de marineros de la flota del cerco protagonizaron una sonora protesta en Vigo que se saldó con trifulcas con la policía y destrozos en el edificio de la Xunta. Fiscalía pedía tres años de prisión para dieciséis personas por un delito de desórdenes públicos y, en caso de una de ellas, otro de lesiones. Finalmente no se ha celebrado el juicio después de que los acusados aceptasen una pena de seis meses de prisión y el pago de 7.337 euros por los daños ocasionados en el edificio administrativo, que serán abonados de forma solidaria (deberán juntar la cantidad entre todos). Una sentencia que "alivió" a los marineros -"podía haber sido peor", dijo uno de ellos-, pero con la que no están conformes. Ni ellos ni los más de 200 compañeros que se movilizaron frente a los juzgados de Vigo para mostrarles su apoyo, y que de madrugada habían amarrado los barcos en señal de protesta.

"Era lo menos malo, pero es malo", lamenta el portavoz de la Asociación de Armadores del Cerco de Galicia (Acerga), Andrés García. "Lo que estaban haciendo era reivindicar el derecho a poder pescar". En su opinión, lo que motivó el "enfado" de los marineros en 2014 fue la "desantención" de la Xunta y la "carga de la policía", que "provocó" los altercados. Los armadores del cerco esperaban poder reunirse aquel día con un representante de la administración gallega, recuerdan, que "no tenía interés" en recibirlos. "La carga de un policía contra un señor de más de 60 años" (hermano de un armador) desembocó en una gran pelea frente a la sede del Gobierno gallego en Vigo. Para Fiscalía, "los acusados [tenían] la clara finalidad de atentar contra la paz pública y la pacífica convivencia, y provocaban a los manifestantes instándoles a invadir el edificio, pasando por encima de la policía [e] incitaban a la violencia".

La conformidad alcanzada ayer implica que no se discute el fondo de los hechos -que hubo disturbios y destrozos-, pero los encausados son los únicos que fueron identificados y, como expusieron sus abogados, "probablemente hubiera otras personas que cometieran estos hechos" u otros "quizá más graves".Uno de los marineros deberá abonar 240 y 4.220 euros de indemnización a dos policías por dos faltas de lesiones. Uno de los agentes sufrió una quemadura "superficial" en una pierna al recibir el impacto de un petardo, y el otro una fascitis plantar "agravada por sus pies cabos", y estuvo 79 días de baja. El Ministerio Público solicitaba antes del juicio una indemnización a los policías de 2.160 y 5.060, respectivamente.

"Los compañeros están algo aliviados, pero somos trabajadores y no estamos acostumbrados a estas cosas", añade Andres García. La del cerco es una flota castigada por el reparto de cuotas -han denunciado el plan de gestión-, y protagonizaron en otoño un amarre que culminó con una larga acampada frente a los edificios de la Xunta en Santiago. Las capturas de sardina han mejorado en los últimos días, pero el problema de fondo es "la escasez de cuota", sobre todo de xarda (caballa) y xurelo. "No vamos a abandonar las reivindicaciones", advierte García.