Un centenar de extrabajadores de Pescanova se reunieron ayer para celebrar una ya habitual comida de confraternización, organizada por el incombustible Gregorio Baudot. La compañía, que surca la historia desde 1960, ha formado un grupo de nostálgicos que se citan con asiduidad para homenagear a compañeros y compartir recuerdos.
A día de hoy la compañía tiene más de 11.000 trabajadores en todo el mundo tras haber acometido sucesivas fases de internacionalización en África o Centroamérica.
