La Confraría de Pescadores de Barallobre responsabiliza a la Xunta de la posible venta de marisco de zonas C -las más contaminadas- que llevó a la Guardia Civil y Hacienda a registrar la sede del pósito el pasado miércoles y arrestar a patrón mayor, el biólogo, el secretario y el responsable de ventas de la entidad por supuestos delitos contra la salud pública, la hacienda pública y falsedad documental.

Los cuatro arrestados, en libertad con cargos, negaron ayer durante una rueda de prensa haber comercializado producto contaminado y apuntaron como origen del problema a las clasificaciones del Instituto Tecnolóxico do Mar (Intecmar), que regula las autorizaciones de marisqueo, por estar "alejadas" de la realidad.

Los afectados de Barallobre afirmaron, como hizo su abogado días atrás, que la denuncia presentada puede deberse a que la cofradía supuestamente vendió producto de zona C, que requiere de un proceso de depuración en bateas para ser comercializado en fresco, como producto de zona B.

"La ría está tan sucia que donde está clasificado como B puede ser en realidad zona C", manifestó el patrón, Carlos Rey, que aseguró no tener "nada" que ocultar.

El Gobierno gallego, por su parte, respondió que es "falso" que haya dos zonas sin clasificar en A Malata. "En las ensenadas de A Gándara y Caranza está prohibida la extracción de marisco debido a los elevados índices de contaminación que presentan, no aptos para el consumo humano. La Consellería do Mar controla estas dos demarcaciones al igual que el resto de las áreas de producción de Galicia", asegura.