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Las opciones de la flota gallega

El cerco vigués retorna al País Vasco tras un año de ausencia acosado por la falta de cupos

La escasez de jurel hasta la fecha, abundante el año pasado, lleva a una decena de barcos de Vigo a viajar al País Vasco -Algunos buques transportaron ayer sus aparejos en camión

Los aparejos del barco de cerco "Tribal" siendo cargadas en un camión ayer en Cangas. // Brais Cabaleiro

El cerco vigués retoma la tradicional ruta por estas fechas hacia aguas del País Vasco a partir de hoy. Una decena de buques salen en dirección a esa zona del Cantábrico con un único objetivo: aprovechar la espectacular campaña de anchoa que se está viviendo estas semanas. De esta forma los armadores cambian la hoja de trabajo que marcaron por estos meses durante 2015 para regresar a un caladero en el que esperan recuperarse de las paupérrimas capturas que consiguieron en lo que va de año en Galicia, tanto en aguas al sur de la comunidad como al norte.

De esta forma, el puerto de Cangas vivió ayer la carga de uno de los aparejos del buque Tribal en un camión para su destino hacia A Coruña, donde la embarcación reposa junto a otras de la Cooperativa de Armadores de Vigo (ARVI) que hoy partirán hacia el País Vasco. "La realidad es que no hay cupos y tenemos que emigrar, no nos queda otra", explica uno de los miembros de esta embarcación de cerco.

En este sentido, recuerda que el año pasado pudieron defenderse con las capturas que conseguían en aguas gallegas, sobre todo de jurel. Sin embargo, esta especie todavía no ha hecho acto de presencia pese a que nos encaminamos ya a mayo y el sector no ve otra alternativa. "Va a tener que aparecer en un momento u otro. Imaginamos que además lo hará en cantidad", indica por su parte Andrés García, portavoz de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (Acerga), que recuerda por otra parte que las capturas del año pasado de jurel habían sido "excepcionales". A estas alturas el año pasado en las lonjas gallegas se habían vendido 4.489 toneladas de jurel, mientras que este año van un 42,8% menos, 2.564.

Ahora, en los puertos del País Vasco -principalmente en el de Ondárroa-, los cerqueros de ARVI se aprovecharán de los buenos precios de la anchoa. "En estos momentos se están pagando entre 1 y 3,5 euros el kilo", destaca el integrante del Tribal. Junto a ellos viajarán, por lo menos, el Mi Nombre Cinco, O Oriente, Novo Ameixa, O Subrido, Colomba Tercero, Curuto Dous y el Ostra Segundo.

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