El suceso del atunero vasco Txori Gorri cuando faenaba en la zona de Somalia (océano Índico) está muy presente también entre las familias de los gallegos que componen la tripulación, a las que sus allegados han llamado para transmitirles lo vivido durante la tragedia. "Fue un susto increíble porque se pensaron que se trataba de una ataque de los piratas", explicó a este periódico uno de los familiares de un marinero de la provincia embarcado en el buque en el que en la mañana del viernes un guarda de seguridad, Juan José V. C., supuestamente mató a tiros a su compañero, José Manuel M. M., antes de encerrarse en un camarote y, posteriormente, suicidarse.

Por su parte, el jefe de máquinas del buque, el ribeirense Juan José González, tranquilizaba ayer a sus familiares y amigos a través de su página de Facebook: "En la tripulación no hay más daño que el susto inicial y la posterior incertidumbre", y asegura que "ningún miembro de la tripulación fue amenazado de forma directa".

Esos momentos de angustia, con el sonido de los disparos como telón de fondo, provocó que toda la tripulación optase por encerrarse en una habitación del pánico que tiene este tipo de barcos, según informa el medio vasco elcorreo.com. En este sentido, los familiares del tripulante gallego recalcaron que el suceso "no tuvo que ver nada con la tripulación".

Según las mismas fuentes cercanas al despliegue de seguridad en la zona que cita el medio vasco, la el hecho de que la tripulación se metiese en la habitación del pánico provocó que el buque se quedara a la deriva "durante algún tiempo". Sin embargo, Juan José González desmiente este último punto a través de Facebook que la embarcación "nunca estuvo a la deriva ni sin gobierno".

El barco, perteneciente a la empresa Inpesca de Bermeo, se supone que llegó ayer a Puerto Victoria, en las islas Seychelles, a dónde tenía previsto llegar a las 6.00 horas. Allí, los familiares del tripulante gallego suponen que "tendrán que declarar como testigos del suceso", aunque matizan que sus allegados a bordo del atunero "no saben qué va a pasar ahora".

Tanto Juan José V. C. como José Manuel M. M. se encargaban de proteger a la embarcación de pabellón español. Los dos pertenecían a la empresa Segur Ibérica y, a falta de confirmación oficial, en su día este buque contaba con al menos un tercer guardia de seguridad, todos autorizados para el uso de armas largas

El Txori Gorri ya fue objeto de una persecución en el año 2009 por parte de un grupo de piratas somalíes a bordo de dos esquifes tan solo días más tarde de la liberación de otro atunero vasco, el Alakrana (fue secuestrado el 3 de octubre de 2009). Desde entonces los barcos se protegieron para intentar evitar los ataques de los piratas en el Cuerno de África.