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Un milagro en las Galápagos

Un buque de Garavilla, firma presente en Galicia, rescata a dos ecuatorianos que llevaban 12 días en el Pacífico sobreviviendo a base de pescado crudo

Imagen de la barca difundida por las Fuerzas Armadas del Ecuador.

La zona de las Galápagos, en el océano Pacífico, fue el escenario un milagro que bien podría tener cabida en una superproducción cinematográfica. Un buque de la firma Conservas Garavilla, responsable de la marca Isabel y con presencia en Galicia (en Vilagarcía y O Grove, por ejemplo), rescató a dos ecuatorianos que se encontraban a la deriva desde hacía 12 días, sobreviviendo a base de pescado crudo y agua de lluvia.

Según informó las Fuerzas Armadas del Ecuador, los tripulantes de la embarcación Leandro y Jesús, C. Quijije y F. Arcentales, llevaban en paradero desconocido desde el día de Navidad. Una vez que fue activado el plan de búsqueda y salvamento marítimo, el atunero Aurora-B se encontró a los dos hombres cuando navegaban a 130 millas náuticas al noreste de la Isla Isabela, la más grande del archipiélago situada a unos 1.000 kilómetros al oeste de la costa de Ecuador. El encuentro tuvo lugar a las 7.50 horas del 5 de enero. Según indicaron desde el propio buque, los náufragos explicaron que se encontraban a la deriva desde hacía varios días y que residían en la localidad de Manta, en Ecuador.

Según las Fuerzas Armadas del país sudamericano los dos tripulantes rescatados se encontraban con una nivel de salud "aceptable" aunque recibieron atención en el atunero.

La Armada ecuatoriana, a través de un comunicado de la Dirección de Espacios Acuáticos (Dirnea) recogido por el periódico El Comercio, señaló un "efusivo agradecimiento a la gente de mar por solidarizarse con los mencionados pescadores que se encontraban a la deriva".

El atunero Aurora-B es uno de los cuatro buques que posee Conservas Garavilla (junto al San Andreas, Charo y Rosita C), que en el año 2011 compró el 100% de la empresa gallega Cuca, propiedad de la familia Pita, que tenía dos factorías en Vilagarcía de Arousa y Boiro. La compañía vasca, que ya tenía plantas en Mundaka (Vizcaya) y también en O Grove, estaba en manos del fondo de capital de riesgo MCH Private Equity hasta que el grupo italiano Bolton Group, propietario de la conserva de atún líder Rio Mare, compró el 55% de la firma.

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