La mesa estará lista hoy para Nochebuena y, en ella, el marisco y el pescado de calidad no podrá faltar. Vigo, como principal puerto pesquero de Europa, surte a los comensales de toda España (y también del extranjero) en una fecha tan señalada. Por eso, el movimiento de mercancías que se vivió en los tres últimos días se tradujo en datos récord del año al duplicar las cantidades habituales con las que se suele trabajar. De esta forma, en lo que al pescado y marisco fresco se refiere, en el puerto de la ciudad olívica se movieron unas 600 toneladas que alcanzaron un valor aproximado de 3,6 millones de euros, según los datos ofrecidos por la Autoridad Portuaria de Vigo.
Concretamente, el lunes fue una jornada "frenética" para los trabajadores del puerto. Se trató del "día fuerte" en cuanto a la actividad general de las tradicionales fiestas navideñas, solo comparable en todo el año con los días previos a la noche de Fin de Año, otras jornadas en las que se trabaja "muchísimo". El primer día de la semana se movieron unas 300 toneladas, algo más del doble de lo que trabajan habitualmente. De ahí las escenas de una multitud de camiones abandonando la zona de Beiramar en dirección a sus respectivos destinos. "Si normalmente trabajamos con tres o cuatro barcos, el lunes fueron el doble", apuntaron fuentes del puerto. De hecho, según la Cooperativa de Armadores de Vigo el lunes ocho barcos de Gran Sol y otros tantos espaderos trajeron sus mercancías al puerto de Vigo.
Estos buques, que habitualmente llegan para quedarse -aprovechan para hacer reparaciones y así las tripulaciones pasan la Navidad con sus respectivas familias-, son los que traen merluza o rape, dos de las especies con una gran importancia económica y también muy demandadas en estas fechas. Así, por ejemplo, el rape "subió mucho" su precio y llegó a los 23 euros el kilo, cuando la semana pasada la media fue de 7,2 euros (con un máximo de casi 11), según los datos de la Plataforma Tecnolóxica da Pesca.
Por su parte, la merluza también aumentó mucho su precio. En concreto, prácticamente se duplicó al pasar de una media de 5 euros el kilo (7,3 de máximo) la semana pasada a los 12 que se llegaron a pagar estos días. Otras especies como la lubina (que entre los días 14 y 18 de este mes costó unos 19 euros de media en Vigo) o el besugo (13,75) pasaron de los 40 euros durante estos tres días de intenso movimiento en la lonja olívica.
Pese a que las cifras son inferiores si las comparamos con hace unos años, cuando en solo un día se podían llegar a mover 500 toneladas de fresco frente a las 300 del lunes, la Autoridad Portuaria celebra las cifras alcanzadas. En su defensa alegan el gran terreno ganado por el sector del congelado. Muchas son las familias que deciden apostar por comprar estos manjares cuando están más baratos. Sobre todo, en el caso del marisco.
Y no es para menos. En los tres días de actividad preNochebuena la nécora (de buen tamaño y muy buena calidad), por ejemplo, alcanzó los 96 euros, aunque se vendió hasta por unos 50 (de menor tamaño). La centolla, por su parte, empezó sobre los 35 euros, pero llegó a bajar hasta los 26 euros.
En cuanto a las especies más caros habitualmente, el percebe y el camarón, los precios se dispararon. En el primer caso, por los grandes y "de buen color", se pagó hasta 225 euros; los de tamaño mediano se quedaron en 177 euros, mientras que los más pequeños se vendieron hasta por 85 euros. En el camarón, por su parte, el "gordo" (como le llaman) rondó los 120 euros, mientras que el mediano se quedó en 50.
La almeja fina (a 50 euros la grande), la babosa (35 euros) y las navajas (que duplicaron su valor hasta los 32 euros) también fueron protagonistas indiscutibles estas tres jornadas.
Todo esto en un ambiente de mucho trajín en el que el personal de lonja descubre a un comprado "más alegre" que no se fija tanto en el euro. "Sin duda se está vendiendo más que el año pasado", afirman fuentes de la Autoridad Portuaria.
La lonja registará otro "pico" de trabajo a partir del próximo lunes: llega 2016
- La Autoridad Portuaria de Vigo sabe que existen dos fechas en el calendario que sobresalen por encima del resto en lo que al tráfico de mercancías pesqueras se refiere: Nochebuena y la llegada del nuevo año. El 2016 traerá consigo otros tres días de intensa actividad que tendrá un efecto muy positivo en los resultados a final de año.Al igual que sucederá esta noche, las familias se intentarán hacer con los mejores productos (sobre todo marisco) para la cena de Nochevieja y la tradicional comida de Año Nuevo. Por ello, desde el puerto esperan otro "pico" de trabajo que reporte, por lo menos, los mismos números que los tres primeros días de esta semana.Coincide además que el día 31 llegará también un jueves, con lo que se espera que sea el lunes 28 el día de más actividad. Precisamente desde la Cooperativa de Armadores de Vigo tienen previsto que nueve buques gransoleros (junto a tres espaderos) traigan sus mercancías ese día.
Un desfase hasta seis veces superior en el precio respecto al mes pasado
- Las familias cada vez compran el marisco antes de que lleguen las fechas clave para intentar así ahorrar dinero para Nochebuena. Por eso, el congelado está ganando terreno. No en vano, los precios del marisco en las subastas de estos tres días fueron hasta cinco veces superiores que hace tan solo un mes.Así, por ejemplo, la nécora, con una media de 73 euros, se pagó en noviembre a una media de 13,42 euros. La centolla, por su parte, el mes pasado costó una media de 6,7 euros, mientras que los tres primeros días de esta semana alcanzó los 30 euros de media.En cuanto a la navaja, muy demandada, pasó de 9,5 euros el kilo a 32 en estas fechas. La almeja, por su pare, de 7,6 euros la babosa a 35 y de 15,5 la fina a 50.Sangrantes son los casos del camarón y los percebes, las dos especies que siempre son las más caras de la subasta. En el primer caso los 120 de media se pagaron en noviembre a 17 euros; en el segundo, los 150 euros pagados desde lunes costaron 19 el mes pasado.
