El cerco gallego agrupado en Acerga ha denunciado este miércoles que el Ministerio de Agricultura "utilizó el BOE para hundir un poco más" al sector con la publicación del plan de gestión para 2016 del Cantábrico Noroeste, que continúa con el mismo reparto en el que se priman los criterio históricos, frente a su reclamación de que se haga por tripulante.

En rueda de prensa celebrada este miércoles en Santiago, el presidente de Acerga, José Blanco, ha cargado contra que "ni Ministerio ni Xunta han atendido las reivindicaciones" de la flota de 120 buques agrupada en esta asociación, y a pesar de que confiaban en que podía haber cambios en el reparto para 2016, éste se ha publicado "por sorpresa" y continúa con el mismo baremo "muy injusto" para ellos.

Al respecto, el portavoz de Acerga, Andrés García, ha recriminado la actitud de "acoso y derribo" de las administraciones central y gallega, que pone en riesgo a los 1.000 empleos directos de los cerqueros que realizan una gestión conjunta de su cuota, así como de 6.500 trabajos indirectos, por la falta de especies para pescar de jurel, caballa y anchoa.

El hecho de que el Gobierno publicase en el BOE el pasado lunes la orden en la que se recoge el nuevo plan de gestión para el Cantábrico Noroeste sin ni siquiera consultar al sector -que sustituye las órdenes de 2014, que estaba anulada por la Audiencia Nacional, y de 2015-, es identificado como "una estrategia para hacer desaparecer cuanto antes" a los cerqueros de Acerga.

Y es que critican que el secretario general de Pesca, Andrés Hermida, se había comprometido a abordar con ellos un nuevo reparto antes de que acabase el año para publicar el plan de gestión, pero no ha sido así, según denuncian.

Además, García censura que "llama la atención" que haya tanta prisa para publicar el decreto para la gestión de 2016 a finales de noviembre de 2015, cuando el de 2014 fue publicado en abril de ese año y el de 2015 en mayo de ese año. Ante tal situación, ya han remitido sendas cartas a la ministra de Agricultura, el secretario general de Pesca, el presidente de la Xunta y la conselleira do Mar.

Por todo ello, los servicios jurídicos de Acerga estudian presentar querellas contra las administraciones y responsables políticos autoras de la "tropelía" de esta orden ministerial publicada por el Ministerio de Agricultura, al tiempo que sopesan si presentar un recursos de inconstitucionalidad al publicarse esta orden con el Gobierno en funciones y en precampaña.

Movilizaciones

Tras quejarse de que tras más de mes y medio acampados ante el edificio de la Xunta en San Caetano, ni el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ni la conselleira do Mar, Rosa Quintana, han salido a "interesarse" por ellos, a pesar de encontrarse a escasos metros, Andrés García ha remarcado que continuarán con la acampada y el próximo sábado se reunirán en asamblea para estudiar medidas a seguir.

En esta línea, ha acusado a la Consellería do Mar de "apoyar" la creación de la Asociación Cerqueiros Galegos para dividir al sector, la cual, a diferencia de Acerga, gestiona sus cuotas de forma individual, nace en Ribeira, "ni siquiera aparece en el registro oficial de asociacones", y mantiene una "estrecha relación" con José Luis Torres Colomer, que fue alcalde popular de esa localidad.

A modo de ejemplo sobre lo que consideran una discriminación a la flota de Acerga, Andrés García ha expuesto que el buque Marín de Bueu, de su asociación, que cuenta con histórico de capturas, tiene "cuota cero".

También como muestra, Andrés García ha esgrimido que el Porto de Aguiño, de Cerqueiros Galegos, cuenta con 448.000 kilos de jurel y caballa, mientras que tres buques similares de Acerga conjuntamente solo cuentan con 360.000 kilos.

Intereses de piscifactorías

Por estos motivos, José Blanco ha definido a Rosa Quintana como la que "más daño hizo" al cerco gallego en su historia, y ha preguntado "qué intereses tiene por detrás" para piscifactorías para buscar la "desaparición" de la flota, a la vez que ha denunciado lo que considera un ataque de la Xunta contra ellos que "podría pasar en una dictadura".

Para resumir, Blanco ha explicado que si no existiese Acerga en defensa de la flota desaparecería "el 70%" de los cerqueros gallegos y "con ello" las familias que dependen de su trabajo.