La Feria Internacional de Productos del Mar Congelados (Conxemar) quiere y puede crecer, y sabe hacia dónde. El evento, uno de los acontecimientos sectoriales más importantes del mundo -quizás solo por detrás de la cita de Bruselas-, puso ayer de manifiesto públicamente que ha superado sus baches y que aspira a mucho más. La XVII edición de la feria ha cogido aún más músculo después de haber superado los daños colaterales de la crisis económica y de haber barrido las "competencias deselales". El presidente de Conxemar, José Luis Freire, destacó que ambos contratiempos han resultado "positivos" porque, a fin de cuentas, la cita de Vigo no hincó la rodilla. "Afortunadamente se apostó por Vigo", expuso. Y, dando el "tirón tan grande" de la ciudad en materia pesquera, Freire aprovechó el discurso inaugural de Conxemar para reclamar, ante el presidente Feijóo, la ampliación del Ifevi. "Teníamos una vieja demanda que estará lista el año que viene", dijo sobre la pasarela entre Peinador y el recinto ferial, pero "necesitamos que se amplíe".

Esta edición de Conxemar ha ocupado los 33.000 metros cuadrados disponibles, con stands en todos los habitáculos de Cotogrande, e incluso la demanda de empresas expositoras superó la oferta. "Algunas quedaron fuera, hubo overbooking". Y no solo la feria, tal y como está ya concebida, sería capaz de ocupar más espacio, sino que el comité directivo de Conxemar pretende, como avanzó FARO, expandir el evento a sectores como el transformador o de distribución. A día de hoy las conserveras, por ejemplo, están fuera de la feria. Para dar cabida a una cita más transversal todavía, José Luis Freire estimó que el Ifevi necesita "unos 5.000 metros cuadrados más". "Yo hice la petición, la haremos de nuevo", exhortó el alcalde de Vigo, Abel Caballero, a preguntas de este diario. "La Xunta de Galicia parece que no se explica demasiado en esta cuestión. Yo la considero vital, central para economía de la ciudad y para la pesca. Porque, efectivamente, podríamos tener una feria de Conxemar mucho más grande", zanjó el regidor. Feijóo, en su intervención durante el acto inaugural, obvió manifestarse al respecto de esta reclamación.

Lo que tienen claro los organizadores -y, a la vista de la expectación de este año, también la industria-, es que Conxemar y Vigo están cogidos de la mano. "Se despejó una incógnita", dijo Freire tras el órdago lanzado por la Seafood de Barcelona. "Para crecer ante eso se había que marchar a Madrid o Barcelona, pero Vigo es una ciudad pesquera pese a los apoyos sorprendentes -dijo Freire, sin citarlos- recabados por el evento catalán, que ya no celebró su cuarta edición y se ha cancelado definitivamente tras perder año tras año en su intento de hundir Conxemar. La cita de Barcelona (renombrada Seafood Expo Southern Europe) estaba organizada por la compañía norteamericana de Portland Diversified Communications, que también se encarga de las ferias de Bruselas, Hong Kong o Boston.

También Caballero se felicitó, antes de los discursos oficiales, de la derrota de la Seafood. "El pulso que nos echó la feria de Barcelona lo perdió 10-0" y "fue desleal, con el apoyo del Gobierno de España, que la apoyó contra la de Vigo. Aquí las ayudas son menores, y conseguimos que Conxemar permanezca donde tiene que permanecer". El mensaje final de Freire, Feijóo y Caballero (que dedicó a los presentes unas palabras en inglés) fue de felicitación tanto a los organizadores como al propio sector. "La competencia nos hace aprender", concluyó el máximo responsable de Conxemar. A los discursos inaugurales asistió también la conselleira do Mar, Rosa Quintana (que se estrenaba en su cargo tras la crisis de Gobierno en la Xunta), el presidente de Abanca, Francisco Javier Etxeberría, y el secretario general de Pesca, Andrés Hermida. La ministra del ramo no asistió este año a la cita, que quiere batir los 26.000 visitantes y los mil millones de volumen negocio que se alcanzaron en 2014.