España tendrá una cuota de 4.280,5 toneladas para pescar fletán negro en aguas gestionadas por la Organización de las Pesquerías del Atlántico Noroeste (NAFO) en 2015, lo que supone una subida anual del 1 %, por primera vez después de varios años de recortes.

Los países de la NAFO han concluido hoy en Vigo la reunión celebrada esta semana, en la que han acordado dicho cupo, según ha informado el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, en un comunicado.

Por el contrario, la cuota española de bacalao en Terranova se reducirá un 5 %, siguiendo las recomendaciones del Consejo Científico de la NAFO, según lo acordado en la reunión, que este año han acogido el Gobierno y la Xunta de Galicia.

En el caso del bacalao de "Flemish Cap", el cupo español será de 1.973 toneladas, frente a las 2.077 de este año, pero inicialmente los científicos recomendaron un recorte del 34 %.

Entre los resultados de la reunión, el Ministerio ha destacado la subida del fletán negro para el año próximo, después de tres años "consecutivos" de bajadas, lo que "atestigua el éxito de los mecanismos de gestión, basados en una estricta regla de explotación.

La cuota global de pesca de fletán en aguas de la NAFO será de 15.578 toneladas (4.280,5 corresponderán a la flota española).

El Ministerio ha añadido que la oposición de la Unión Europea (UE) "ha conseguido neutralizar la pretensión de modificar las normas de etiquetado de las capturas, que habrían afectado gravemente a la flota española"

En cuanto a otras especies de interés para España, la cuota de raya en la NAFO se mantendrá en 3.403 toneladas durante los dos próximos dos años y el cupo de gallineta en "Flemish Cap" subirá un 3 %.

Además, la NAFO ha decidido reabrir la pescaría de mendo y una moratoria en el caso de varias pesquerías de camarón.

El Ministerio ha añadido que la NAFO, que "cuenta con uno de los sistemas más avanzados de protección de ecosistemas marinos vulnerables" ha ampliado "con el apoyo de España, las zonas cerradas a la pesca y ha extendido las vedas actuales hasta 2020", según el comunicado.

Por otro lado, en la NAFO ha quedado de manifiesto la "preocupación por el impacto de otras actividades económicas, en concreto las de exploración gasística y petrolera" en las zonas reguladas por esa organización, según la misma fuente.

Canadá se ha comprometido, a petición de la UE, a notificar a NAFO las actividades de exploración de hidrocarburos para evitar incidentes con los buques pesqueros y científicos como los ocurridos en 2013 y 2014, según el Ministerio.

La Coalición para la protección de Aguas Profundas (DSSC, siglas en inglés) ha manifestado, en un comunicado, que la NAFO ha decidido cerrar nuevas áreas para proteger los corales o las esponjas, pero "no ha adoptado todas las recomendaciones identificadas por sus científicos" para salvaguardar los ecosistemas frágiles.

La ONG ha lamentado que algunos países de la NAFO "rechacen" avanzar en la protección de ecosistemas, en referencia sobre todo a Japón o a Rusia.