Las 63 cofradías gallegas, 22 de ellas de la provincia de Pontevedra, apuran las últimas horas antes de las votaciones de las que mañana sábado habrán de salir los nuevos integrantes de las juntas generales de cada entidad que en unos días designarán a sus órganos de gobierno, con los patrones o patronas mayores como máximos exponentes. El proceso de votaciones, singular en esta ocasión al celebrarse simultáneamente en toda la comunidad, centra en buena medida la actividad de las últimas horas en los puertos gallegos en una campaña electoral que concluyó ayer y que deja para la jornada de hoy solo espacio para la reflexión sobre el voto entre las distintas candidaturas.

Sin embargo, de la veintena de cofradías pontevedresas hay al menos tres en las que la tensión electoral es inexistente ya que ni siquiera se harán necesarias las elecciones al coincidir en una lista cerrada el mismo número de candidatos que el de miembros de la junta general elegibles. Es el caso de las de Vilaxoán, Marín y Sanxenxo, como confirmaron a este diario desde las propias cofradías. La inexistencia de alternativa de voto hace innecesaria la votación, por lo que tales candidatos se consideran ya elegidos, por lo que únicamente deberán asumir su función y reunirse en el plazo legal en los próximos días para designar al cabildo de sus respectivas cofradías y a su patrón mayor.

Mientras, en otras cofradías, como las de Moaña o Bueu, las candidaturas presentadas, como lista única, cuentan con un candidato más que los legalmente necesarios y ello para dejar ya configurada la sustitución del futuro patrón mayor en la junta general. Es por ello que en ambas solo será necesaria la votación de un sector.

A estas elecciones, convocadas de forma conjunta para todas las cofradías gallegas, se presentan un total de 1.614 candidatos en representación de los trabajadores del sector y 1.054 en el de los empresarios o armadores de las distintas artes y actividades de la pesca y el marisqueo.

El censo electoral del conjunto de las cofradías gallegas está compuesto por casi 13.000 personas, cifra que es el resultado de la suma de los 8.300 votantes del sector de los trabajadores (tripulantes) y de los 4.500 del de los armadores.

Cada cofradía elige mañana un número diferente de vocales de su junta general y ésta se establece en función del total de socios de cada entidad. Así, las de menor dimensión, es decir, las de menos de 50 socios, cuentan con 10 vocales, mientras que las de mayor número de afiliados, las de más de 350 personas en el censo electoral, cuentan con una junta general de 24 miembros.

Entre las mayores, por número de socio y vocales, están las de A Illa de Arousa, Cambados, Burela, O Grove, Vilanova, Carril o Rianxo, mientras que entre las de menor número de votantes están las de Marín, Lira o Sanxenxo, con 10 vocales cada una. La de Vigo, pese a la dimensión de su puerto pesquero, cuenta con menos de 150 votantes, lo que le otorga una junta general de solo 14 miembros.

Renovación

La campaña electoral está presidida por la "normalidad", en palabras del actual presidente de la federación gallega (y candidato a repetir como patrón mayor de Cambados), Benito González, quien espera que se registre una alta participación. "Sería bueno que todo el mundo diera su opinión sobre cómo deben llevarse las cosas en las cofradías", aseguró ayer González, quien reconoció que en esta ocasión el sector está "más pendiente" del proceso electoral que en otras ocasiones por ser simultáneo en todas las cofradías gallegas.

El aún presidente de la federación gallega vaticina que tras las votaciones de mañana cabe esperar los cambios "normales" y que saldrá "un poco de todo, porque no sería bueno que fuera todo nuevo ni tampoco que todo fuera viejo; habrá cofradías que se renovarán y al final saldrá de todo un poco, ni blanco ni negro, habrá veteranos y gente nueva", es decir, se prevé variedad de sensibilidades.