La comisión de Pesca del Parlamento Europeo (PE) dio ayer el visto bueno a los subsidios para la renovación de la flota, una decisión que ha sido criticada por las organizaciones ecologistas, que creen que contribuirá a mantener los excesos pesqueros.

Los diputados han aprobado un informe del francés Alain Cadec (PPE) sobre el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP) y sus ayudas para 2014-2020, del que dependen las subvenciones al sector en los próximos años.

En particular, respaldan los subsidios a la construcción de nuevos barcos y a la renovación de los buques de menos de 12 metros de eslora y más de 35 años de antigüedad, que podrían recibir hasta 80.000 euros procedentes del FEMP. También respaldan las ayudas a la sustitución de los motores de los buques, y para la instalación de los jóvenes pescadores.

El ponente del informe comentó en rueda de prensa que las medidas respaldadas contribuirán a "una pesca sostenible, en un sector competitivo" y consideró que las medidas respaldadas son "responsables".

Sin embargo, la comisaria europea de Pesca, Maria Damanaki, señaló que los diputados han apoyado una reforma menos ambiciosa que la que defiende Bruselas, partidaria de "poner fin a los ineficaces subsidios del pasado, que contribuyeron a la sobrepesca y al declive económico del sector".

Los grupos ecologistas han indicado que el voto de los eurodiputados supone un paso atrás con respecto al reglamento base de la reforma pesquera, ya acordado entre las instituciones europeas. El apoyo a los subsidios al sector pesquero "no favorecerá al público, ni mejorará las perspectivas económicas del sector o la recuperación de nuestras aguas", según un comunicado de Greenpeace.

El diputado Raúl Romeva (ICV), destacó por su parte que la comisión de Pesca ha desaprovechado "la oportunidad de acabar con la nefasta política de subvencionar la sobrepesca y la sobreexplotación de nuestros mares y océanos con dinero público".

También la organización ecologista WWF ha considerado que el voto es "incoherente" con las nuevas normas ya aprobadas, dado que las inversiones en nuevos barcos y equipamiento "permitirán a los buques estar más tiempo en el mar y acceder a las últimas reservas pesqueras, situadas lejos de los puertos".

El nuevo fondo pesquero, que contará con más de 6.500 millones de euros entre 2014 y 2020, debe ser consensuado entre el consejo de ministros de la Unión Europea y la Eurocámara.

El pleno de la Eurocámara tiene previsto votarlo el próximo otoño.