Con la prevención de no conocer al detalle el acuerdo, la consellería do Mar, que dirige Rosa Quintana, avanzó ayer una valoración positiva del pacto "porque recoge los principales aspectos demandados por Galicia".En concreto, precisa que recoge "casi sin matices cuestiones como el Rendimiento Máximo Sostenible".Valora también la Xunta que "también se flexibiliza la aplicación de los descartes y se recoge un aspecto fundamental defendido por Galicia, que es la pesca costera artesanal". Con este acuerdo, según Mar "se consigue un equilibrio en los tres pilares defendidos desde Galicia: social, económico y ambiental". Además, entiende que se hace necesario definir un fondo económico adecuado para aplicar los cambios.

Respecto a su compromiso de denunciar ante la justicia el mantenimiento del principio de estabidad relativa por el que se reparten las cuotas y que no se modifica, la consellería señala que es necesario esperar para evaluar la influencia del acuerdo.

Matices socialistas

Por su parte, el eurodiputado socialista Antolín Sánchez Presedo indicó que la reforma "mejora sensiblemente el marco actual y plantea una actividad basada en la sostenibilidad". Sin embargo, matizó que "como gallegos y españoles hubiéramos deseado ir más lejos y eliminar el principio de estabilidad relativa para todos los segmentos de la flota y las excepciones a las reglas del mercado interior para nuestro sector". También subrayó que al aprovechar todas las capturas reguladas se "contribuirá al abaratamiento de los costes de producción y a flexibilizar, por primera vez, la rigidez del principio de estabilidad relativa".