La Policía Nacional detuvo a doce miembros de Greenpeace por encadenarse a un barco pesquero ante la puerta del Ministerio de Agricultura para reclamar una pesca sostenible y cuestionar la gestión del ministro Arias Cañete. Tras prestar declaración, quedaron libres con cargos de resistencia y desobediencia a la autoridad. La asociación de armadores de artes menores de Galicia, Asoar-Armega, apoyó la acción de Greenpeace.