El pleno del Parlamento Europeo votó el pasado jueves un mandato de negociación con los Estados miembros para introducir normas más estrictas sobre el reciclaje de barcos. Los diputados proponen reducir los efectos adversos de los desguaces descuidados que provocan accidentes, lesiones o daños a las personas y el medio ambiente, mediante la obligación de desmontar los buques en instalaciones o astilleros aprobados por la UE.