La directora general de Asuntos Marítimos y Pesca de la UE, Lowri Evans, realizó ayer una visita a Vigo que estuvo rodeada del más absoluto secretismo y en la que estuvo acompañada por el presidente del Consejo de Administración de la Agencia Europea de Control de la Pesca, el sueco Jörgen Holmquist, por el secretario general de Pesca del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Carlos Domínguez, y por la conselleira do Medio Rural e do Mar, Rosa Quintana.

Ni la agencia comunitaria de Pesca ni el ministerio informaron de tal visita mientras que fuentes del departamento autonómico de Mar se negaron incluso a comentarla, confirmarla o desmentirla. Este diario pudo saber, sin embargo, que la responsable marítima de la UE incluso realizó una visita a un polígono de bateas de mejillón y celebró una reunión con el sector en la sede de la Cooperativa de Armadores de Vigo.

La patronal pesquera viguesa tampoco comunicó la visita de Evans y sus destacados acompañantes a su sede aunque este diario pudo confirmarla por otras fuentes.

En el encuentro con la flota, que se prolongó cerca de dos horas, es más que probable que se abordaran las cuestiones que más preocupan al sector en el marco del actual proceso de reforma de la Política Pesquera Común, sobre la que los armadores vigueses han elaborado varios documentos de aportaciones.

Aun sin confirmación de lo tratado es fácil suponer que se plantearan las conocidas reclamaciones e inquietudes de la flota, como las que se refieren a la nueva política de descartes, las limitaciones al arrastre o la escasez de cuotas pesqueras.