Los sindicatos entienden como "un nuevo ataque" para "descapitalizar" el área sanitaria de Vigo en beneficio de la Santiago la reciente decisión del Sergas de desviar allí las pruebas PET de los pacientes del área sanitaria de Pontevedra. Reprochan que se obligue a los pacientes a desplazarse más kilómetros y que se detraigan pacientes y, por tanto, recursos al Sur de Galicia

Comisiones Obreras denuncia un "nuevo ataque" del Sergas al área viguesa. Recuerda que esta retirada de población de referencia ya empezó con otras especialidades -Cirugía Cardíaca, Cardiología, Oncología Radioterápica, Cirugía Torácica, Neurocirugía pediátrica, Cirugía Plástica y Cirugía Pediátrica-. Resalta que, pasados casi cuatro años, "el Sergas no solo no cumplió la promesa de devolver dichos pacientes a los hospitales vigueses, si no que ahora abunda en la descapitalización", señala Ángel Cameselle. Exige a Sanidade "la reversión de estas decisiones y un giro radical en la política de destrucción de empleo" en el área viguesa.

La Confederación Intersindical Galega lamenta el nuevo "debilitamiento" que esta decisión significa para el Chuvi. Manuel González Moreira alerta de que "si retiran población, también quitan recursos". "De esta manera nunca tendremos los necesarios". Atribuye este movimiento a que en el hospital de Santiago "no tienen pacientes suficientes" para mantener los recursos de los que disponen. Subraya que no desean entrar en "una guerra localista", pero defiende que los medios deben facilitarse donde están los pacientes y no al revés. Destaca el "perjuicio" a los usuarios de Pontevedra.

El sindicato médico Omega abunda en esto. "No es lo mismo ir de Pontevedra a Vigo que a Santiago, ya solo por el coste del peaje", resalta Manuel Rodríguez. En cuanto a la repercusión para el Chuvi, sostiene que "es otra vuelta de tuerca para descapitalizar el sur de Galicia y, en concreto, Vigo" y añade: "va a ocasionar una pérdida sustancial del presupuesto".

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios también opina que se trata de "una decisión política" para beneficiar a Santiago. "Hay más pacientes para estas pruebas, pero el tiempo de respuesta está siendo corto", defiende. En concreto, según los últimos datos de Sanidade -al cierre de 2017-, Vigo hace estas pruebas en 3,6 días desde que se piden. En cambio, en Santiago figuran 23 días. Xosé Lois Martínez añade que, además, en Vigo el informe se hace el mismo día, agilizando el diagnóstico, algo que no sucede en Santiago. "La decisión no se entiende por criterios asistenciales", concluye.

Sanidade, sin embargo, insiste en que "se ha priorizado la reducción de los tiempos de demora, en beneficio tanto de los pacientes del área de Vigo como del norte de Pontevedra, que verán reducidas las demoras en los diagnósticos oncológicos". Niega que sea un desvío, sino que "se han flexibilizado las referencias" para que los pacientes opten. Los sindicatos entienden esto como una "falacia", ya que por defecto se mandan a Santiago.