Con la autopista del mar, el Puerto está dispuesto a hacer lo que sea necesario para no perjudicar la actividad de esta estratégica ruta. Como ocurre ahora con el cierre de la rampa de uso exclusivo de los buques de la conexión marítima entre Vigo y Francia, revelado ayer por FARO. El debilitamiento del punto de apoyo en tierra de la plataforma flotante por el intenso uso durante las cinco escalas semanales y la tensión ejercida por los fuertes temporales en este primer año de funcionamiento aconseja hacer una obra de refuerzo para lo que se necesita clausurar la infraestructura durante un mes. El inicio de estos trabajos había sido comunicado a la armadora para el día 28, pero el presidente, aun con la actuación ya contratada, garantizó ayer que se retrasará la fecha a "otra menos perjudicial para Suardiaz".

Desde este viernes que la naviera de Juan Riva, nada más recibir la confirmación del cierre de la rampa 7 desde la citada fecha, trata de convencer a la Autoridad Portuaria para que retrasase esta medida. Apela a la dificultad de reubicar todas las mercancías de la autopista del mar (coches y semirremolques) que tiene concentradas alrededor de la plataforma flotante en otro emplazamiento de la explanada dada la congestión actual de esta superficie por la acumulación de vehículos estacionados y la entrada, ahora constante, de las nuevas furgonetas K9. "Sabemos que están intranquilos", admite el presidente que para rebajar la preocupación de la armadora, sin esperar a una nueva consulta con su staff, quiso dejar claro que las obras que exigen apartar temporalmente del servicio la plataforma se llevarán a cabo "en el momento menos traumático para Suardiaz".

La decisión de cerrar la rampa 7 se adoptó después de que los ingenieros de Praza da Estrela analizasen durante meses el comportamiento de la estructura. Construida por Vulcano, gracias a su flotabilidad puede nivelarse con la plataforma de popa de los buques por muy pronunciada que sea la pleamar o la bajamar. Pero esta ventaja la hace más vulnerable que las rampas fijas al desgaste por uso, sin olvidar la incidencia de los vientos de componente norte por haberse construido como complemento de una línea de atraque de duques de alba ubicada en una lámina de agua sin ningún abrigo.

A estas dos causas se achaca el deterioro que sufre el punto de apoyo en tierra que la obra proyectada se propone reforzar elevando con gatos hidráulicos la estructura. Obviamente incompatible con los atraques de los barcos. Una actuación, el Puerto justificó esta actuación por "seguridad" dado el estado que presenta la base pero que López Veiga no considera "tan urgente". "De momento no se rompe, ni mucho menos. Así que si puede aguantar no hay ningún problema en retrasar la fecha comunicada", asegura.

El Puerto ya sabe cuál sería el mejor momento para llevar a cabo los trabajos de refuerzo, y coincide con el apuntado por la armadora en las llamadas que realizó este viernes alarmada por la repercusión que tendría iniciarlos el día 28. Agosto se presenta como el mes idóneo al reducirse las escalas de la autopista del mar por el parón vacacional de la planta de PSA en Balaídos, razón por la cual también la explanada ofrece espacio alternativo suficiente donde reagrupar las mercancías que mueven los buques de Suardiaz. Aunque suscribe estos argumentos, de momento López Veiga prefiere no concretar fecha. Como la duración del cierre todavía no está claro -el departamento de Obras del Puerto estima un par de semanas frente al mes que anunciaron a la armadora-, el presidente quiere reunirse de nuevo con sus técnicos para encajar con el calendario en mano lo "más conveniente" para la naviera.