Siete pitidos cortos y uno largo. Esta es la señal que indica que algo en alta mar va mal y que la evacuación será inminente. Puede ocurrir en cualquier momento, por ejemplo, un viaje a las Islas Cíes o a las Ons y hay que estar alerta ante lo qué hacer y cómo comportarse. Estas normas de seguridad fueron asimiladas por más de un centenar de alumnos de la Escuela de formación profesional marítima de Bueu y el Instituto Pesquero de Vigo que participaron en un simulacro organizado por la naviera Piratas de Nabia y Capitanía Marítima.

Los estudiantes simularon encontrarse en uno de estos tradicionales viajes estivales al Parque Natural cuando fueron evacuados de la embarcación. Para ello, desde tierra lanzaron dos grandes balsas con capacidad para 101 personas y descolgaron un tobogán por el que se descolgaron los pasajeros, armados ya con un chaleco salvavidas. Una zodiak fue la encargada de trasladar las dos grandes balsas a puerto. El alumnado también participó en una serie de charlas sobre protocolos de seguridad.