La dirección de Ciudadanos en Madrid ha intensificado en las últimas semanas los contactos con el exconselleiro de Economía e Industria Javier Guerra para incorporarlo a su proyecto. A día de hoy el político vigués, que disputó a Elena Muñoz la presidencia del PP de Vigo en diciembre de 2016, sigue siendo afiliado popular al igual que el resto de los miembros de su grupo, crítico con el rumbo del partido en la primera urbe gallega.

El partido de Rivera reconoce conversaciones abiertas con Guerra para situarlo como candidato en Vigo, donde la formación naranja carece de una estructura sólida o nombres reconocibles, si bien desde el entorno del también exconcejal vigués se habla de una propuesta con opciones territoriales abiertas que no tendría por qué circunscribirse a las municipales.

En este momento no hay ninguna decisión tomada. La última reunión que mantuvo Guerra con sus partidarios fue el pasado lunes. En ese encuentro, el dirigente vigués expuso a los suyos que a nivel individual cada uno era libre de decidir su futuro, y dejó abiertas las alternativas, que pasarían por seguir manteniéndose como hasta ahora como grupo crítico dentro del PP local, dar otra oportunidad a la unidad, formar un partido independiente o bien integrarse en otro ya existente como ocurriría en el caso de Ciudadanos. En cualquier caso, cada uno de los miembros del grupo tomaría la decisión que quisiera de manera individual.

Lo que no oculta el entorno del exconselleiro es que se sienten desatendidos por la dirección local del partido pese a que tras las primarias de hace año y medio se les prometió mano tendida para trabajar de forma conjunta. En esas elecciones internas Elena Muñoz salió elegida presidenta con el 56% de los votos y un margen estrecho de 100 papeletas, lo que denotaba la fuerte división que atravesaba la formación a nivel local.