Cientos de fieles salieron ayer a la calle en la tradicional procesión de la Virgen de Fátima. Tras una jornada repleta de misas, tras la última la comitiva abandonó el templo parroquial hacia la Travesía de Vigo, Urzáiz y de nuevo Vía Norte antes de regresar a la iglesia.

La de Fátima es año tras año una de las procesiones más multitudinarias de la ciudad. Numerosos devotos desafían al mal tiempo para poder ver a María Santísima por las calles. Además, en 2017 estrenaron decoración tras la humanización de la mitad de Vía Norte. El Concello adjudicó recientemente la reforma del tramo que falta, por lo que en 2019 la Virgen recorrerá un barrio totalmente renovado.

Este año se celebraron los 101 años de la primera aparición de la Virgen de Fátima en las colinas de Cova de Iría, en Portugal. Su presencia fue vista por Lucía, Jacinta y Francisco, unos niños pastores de la zona. Los tres jóvenes escucharon atentamente cómo les contaba que venía del cielo y les pidió que volvieran a los seis meses a ese mismo lugar. Esta hazaña fue reconocida por la Iglesia y Juan Pablo II beatificó a los jóvenes Jacinto y Francisca en el 2000 en presencia de Sor Lucía, que murió en 2005. Además, el Papa Francisco regresó al santuario de Fátima el año pasado con motivo de este centenario.