Fruto de una iniciativa impulsada en 2001 por el Puerto de Barcelona y Mercazaragoza, empezó en una parcela de la margen izquierda del Ebro como un depósito de contenedores para convertirse en lo que es hoy: el "ferropuerto" líder en España y el séptimo "puerto" nacional en movimiento de contenedores.
La Terminal Marítima de Zaragoza (TMZ) batió en 2017 su récord al superar los 2.400 trenes con más de 353.000 Teus (la medida estándar de un contenedor de seis metros). Con este balance se coloca por detrás del puerto de Tenerife -sexto en el ranking español- y por delante del de Castellón y también de Vigo, que cerró el año pasado con 183.000. Este volumen coincide con el que manipulaba TMZ en 2016, lo que prueba el formidable crecimiento de este apartadero ferroviario, superior al 20%.
Por algo este "Puerto Seco" zaragozano está considerado como un nudo logístico "de primer orden en el panorama nacional". Volcado en la optimización del tráfico intermodal de mercancías y pionero en logística de frío, su actividad se disparó tras una serie de ampliaciones iniciadas en 2007. Pero parte de su éxito -además se debe a su estructura societaria, con una parte pública aliada con los dos principales terminalistas a nivel mundial: APM Terminals (Grupo Maersk) y Hutchison Port Holdings.
Conectado con los principales puertos españoles (Barcelona, Bilbao, Vigo, Algeciras...), el pasado diciembre TMZ dio el salto continental al poner en marcha el enlace ferroviario con Zhenghzou (China). Con una salida semanal para contenedores, el tiempo de recorrido de los 13.000 kilómetros que separan ambas ciudades es de 26 días.
