Tras el ataque a una mujer en Redondela de dos perros de razas potencialmente peligrosas el pasado viernes, el fin de semana se registraron en Vigo un par de denuncias por presuntas infracciones. La primera de ella fue el pasado sábado a las 18.45 horas, cuando una unidad de la Policía Local observó a un joven con un perro de estas características y sin bozal en el entorno de la calle Ramiro Pascual.
Los agentes le requirieron la documentación y este dijo carecer tanto de licencia como de seguro. Además, se comprobó que el perro carecía de microchip y no estaba dado de alta en el Registro Municipal de Perros Potencialmente Peligrosos. Se trataba de un Bull Terrier, macho de
aproximadamente 2 años de edad. Se denunció por todo ello al propietario.
Dos perros sueltos
Por otro lado, también el sábado a las 21 horas, un vecino requirió la presencia de la Policía en la avenida Ricardo Mella ante la presencia de dos perros de raza potencialmente peligrosa. Una vez allí, los agentes comprobaron que se trataba de dos American Bully y se trasladaron a la Protectora de Animales. Mediante el microchip se comprobó quién era el propietario al que se denunció por dejarlos sueltos o en condiciones de causar daños.
La identificación de los animales de la especie canina es obligatoria sin excepción. El animal debe ser identificado dentro de los tres primeros meses de vida y, en todo caso, antes de ser objeto de transmisión. Asimismo, deben ser objeto de identificación obligatoria todos los animales
catalogados como potencialmente peligrosos y no hacerlo supone una infracción grave sancionada con multa hasta 5.000 euros.
Además, la tenencia y custodia de los animales potencialmente peligrosos requerirá la obtención previa de la licencia administrativa otorgada por el ayuntamiento e inscribirse en el Registro Municipal de Animales Potencialmente Peligrosos. No hacerlo constituye una infracción muy grave sancionada con multas desde 2.404,06 hasta 15.025,30 euros.
