El Plan de Transporte Metropolitano de Vigo está a punto de cumplir tres años. A solo unas semanas del aniversario de su puesta en marcha en 12 municipios de la comarca -los del área, salvo Vigo y Gondomar-, la Xunta hizo ayer balance de lo que considera un "éxito incuestionable" del servicio.

La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, explicó que desde abril de 2015 el plan alcanzó más de ocho millones de viajes en el área olívica. En total se repartieron casi 52.000 tarjetas ordinarias, de las que 16.000 se tramitaron en Vigo. A ellas se suman casi 10.800 tarjas "Xente Nova". Al igual que ocurre con las ordinarias, destacan las que pertenecen a vigueses.

Vázquez detalló además que 2,9 de los 8 millones de desplazamientos anotados desde 2015 se realizaron a lo largo del último año, lo que representa además un aumento del 7% con respecto a 2016. "Los datos demuestran el éxito incuestionable y la buena acogida de un plan que busca fomentar el transporte público", destacó la conselleira, quien destacó además el "ahorro" que ofrece a las familias. La titular de Infraestruturas explicó que los beneficios para los usuarios podrían ser mayores si Vigo se sumase.

Seis de cada diez viajes bonificados por el plan de transporte en el área de Vigo se realizan en autobús y los restante cuatro en transporte de ría, entre la ciudad y O Morrazo. En cuanto a la demanda, explicó que además de las casi 16.000 tarjetas emitidas en Vigo, se han tramitado unas 12.300 de Cangas, 5.700 de Moaña y 4.700 de Redondela. De las 10.800 tarjetas "Xente Nova" -para menores de 19 años- cerca de 4.400 se entregaron en Vigo.

Vázquez recordó que el rechazo de Vigo a incorporarse en el plan impide a sus usuarios disfrutar de mayores descuentos. "Caballero incumplió su palabra con la Xunta, con el resto de ayuntamientos y con los vecinos", lamento Vázquez antes de recordar a los alcaldes de Moaña y Cangas -quienes reclaman una comisión para reactivar el convenio y que Vigo se sume al plan- que en su día "hicieron de comparsa" al regidor olívico.

La conselleira se refirió también a Gondomar, cuyo alcalde, el socialista Francisco Ferreira, reclama la adhesión del municipio al plan. Vázquez recordó que Ferreira votó en el pleno, en dos ocasiones, en contra de la entrada del municipio en el sistema. "Sorprende que lo exija ahora, y con trato preferente", zanjó. Según explicó la Xunta hay 25 localidades gallegas pendientes de adherirse a los diferentes planes. "Hay otros concellos por delante y que nunca rechazaron el plan", concluyó Vázquez tras aclarar que la Xunta no puede hacer diferencias.