La Consellería de Cultura se pronuncia e insta al Concello de Vigo a "despejar cualquier duda sobre la legalidad" del proyecto de las rampas de Gran Vía por considerar "preciso y necesario" completar la autorización ante la Dirección Xeral de Patrimonio. Esta es la tesis que sostiene Santiago y que ayer reiteró en la ciudad el delegado territorial, Ignacio López-Chaves, que insistió en que el permiso del departamento autonómico "es preceptivo" para poder ejecutar una obra de 8,9 millones que transformará el bulevar central de la calle. López-Chaves aseguró que es "el mismo trámite que el gobierno local está exigiendo también a los particulares".

Desde la Xunta insisten en que no se tiene intención de paralizar ni de impulsar ningún proyecto cuya responsabilidad es municipal y que se limitan a aplicar la normativa vigente.

El alcalde, sin embargo, reiteró ayer que las rampas son "una obra monumental" y que no se precisa pasar por Patrimonio. "Quieren paralizarlo antes de las elecciones pero contamos con informes de técnicos municipales, no es una opinión subjetiva", defendió.