La directiva de A Pedra sigue buscando fórmulas para relanzar el mercado, que aún no ha recuperado el pulso tras los precintos judiciales que siguieron a la macrorredada de la "Operación Cuarzo" en octubre de 2015. Su presidente, Alfonso Méndez, explica que la junta plantea reformar la nave principal del recinto. Su idea es suprimir las divisiones interiores de los puestos para crear un gran espacio abierto donde los comerciantes puedan exponer su mercancía. En 2017 en el recinto ya se realizaron obras similares, aunque solo para unificar algunos negocios.

Méndez insiste en que con ese cambio A Pedra podría recuperar pulso y salir del "coma" en el que sigue a día de hoy, con apenas actividad a pesar de los diferentes intentos que se han realizado por dinamizarlo. "Se trataría de dejar un espacio totalmente abierto", señala su presidente, que pone como ejemplo las plantas de moda de El Corte Inglés, donde conviven diferentes marcas. Su propuesta se ceñiría, en cualquier caso, a la nave principal de la planta alta. En la de menor tamaño no sería posible hacerlo, al menos de momento, por las humedades.

Para que el cambio salga adelante es imprescindible que la asamblea de propietarios lo acepte por mayoría. Méndez confía en poder celebrar la reunión en un margen de medio mes -los estatutos obligan a realizar las convocatorias con varias semanas de antelación- y que la propuesta logre el respaldo de los socios. Explica además que entre los propietarios de la nave hay casi una decena que estarían dispuestos a entregar sus puestos a cambio de que la asociación les condone la deuda que acumulan desde hace tiempo.

Si la medida no convenciera a la asamblea, Méndez es partidario de abrir las puertas a la venta de puestos para que puedan entrar compradores interesados que ahora mismo son ajenos al recinto. Además de la falta de actividad, A Pedra padece un problema de morosidad, ya que parte de sus asociados no abonan las facturas de electricidad, seguridad, canon municipal, agua... lo que lastra las cuentas del colectivo y penaliza a los comerciantes que sí las abonan.