La visita que protagonizó este fin de semana el buque escuela ruso "Kruzenshtern" sirvió al Puerto de Vigo para estrenar el nuevo obsequio de bienvenida a las autoridades, una camiseta del Celta que el presidente Enrique López Veiga entregó al capitán Mikhail Eremchenko.

Fruto de un acuerdo con el Real Club Celta, el Puerto recibió la semana pasada la primera tanda de camisetas que se diferencian de las que visten los jugadores del primer equipo solo por añadir el logotipo del Puerto de Vigo. López Veiga está convencido de la idoneidad de esta iniciativa al considerar al Celta como un excelente embajador de la ciudad de Vigo, por lo que también lo es de su puerto.

En el histórico buque viajaban 122 cadetes, 57 tripulantes y un pasajero como turista, según datos de la Fundación Traslatio, que ayer agradeció la colaboración del Puerto y otras empresas implicadas en la arribada, como la agencia consignataria Incargo Galicia, para que la jornada de puertas abiertas fuera "un auténtico éxito". Traslatio asegura que la asistencia como prueba la asistencia superó las 5.000 personas.

Gracias a la cálida acogida que recibió el tercer mayor buque escuela del mundo, su capitán mostró su intención de repetir la visita el año que viene. Este es el objetivo que persigue la Fundación Traslatio, que "el Puerto de Vigo se

convierta en escala obligada de grandes veleros que como el Kruzenshtern fomenten el interés de los vigueses por el mundo marítimo".