Mitad indignación, mitad resignación. Centenares de afectados por la incidencia ferroviaria detectada este lunes en el municipio de Arbo tuvieron que completar el recorrido entre la estación de Guixar y la terminal de Ourense por carretera. Tanto los que partían desde Vigo como los que tenían como destino la ciudad olívica mostraban su tolerancia con Renfe pero urgían a la empresa a acometer mejoras en las conexiones por tren que hay en Galicia. "Ellos no pueden controlar las inclemencias del tiempo, pero sí que pueden renovar la vía. Parece que para salir de Galicia hay que empujar el tren porque va muy lento", apuntó Francisco Rodríguez, que ayer viajó hasta Tarragona y que se enteró en la propia estación que tendría que coger un bus. "Podrían mejorar el sistema informativo que tienen", apostilló.

Precisamente la escasa comunicación por parte de la compañía protagonizaba la queja generalizada de los pasajeros. La mayoría se enteraban de que su tren no estaba disponible cuando accedían al andén y no lo encontraban o a través de personas en la terminal que poco o nada tenían que ver con Renfe. "Cojo el tren en muchas ocasiones para ir desde Ourense hasta Vigo y la línea no es del todo mala. Lo que sí suelo echar en falta es más información de las incidencias. Es cierto que tenían el aviso en la web, pero no todos los usuarios pueden acceder a la red", comentó Ariadna López.

En lo que también coincidían los afectados era en el buen trato de los trabajadores ferroviarios. Beatriz Oliva llegó ayer desde León para solventar unos trámites administrativos en la urbe olívica y regresar por la tarde. "La atención fue fantástica. Los empleados acompañaron a las personas mayores, cargaron con el equipaje de los usuarios que llevaban más de una maleta y estaban muy atentos para que nadie se quedase en tierra. Por esa parte no hay ninguna queja porque se portaron muy bien", aseguró.

La avería en la línea también afectó a turistas que querían conocer otras ciudades. Roberto Ferreira compró el lunes los billetes pese a saber que la vía estaba en mal estado. "Me avisaron de que tendría que hacer parte del viaje en bus. Es más cómodo no tener que bajarse del convoy pero son cosas que pasan y hay que amoldarse", apuntó.

Por otro lado, ayer estaba previsto que algunos trenes entre Vigo y Madrid evitasen el transbordo por carretera y se desviasen por Santiago de Compostela. Sin embargo, a primera hora de la tarde Renfe informaba de que el convoy Alvia 4354 entre ambas ciudades iniciaría su recorrido en Ourense y que los viajeros realizarían parte del trayecto en autocar.

Fuentes no oficiales de la compañía señalaron a este periódico que la razón se debió a que el maquinista no conocía el nuevo recorrido. Está previsto que aquellos que si lo han cubierto en alguna ocasión puedan tomar el desvío por la capital gallega para así evitar en engorroso cambio de vehículo.

El diputado del BNG, Luis Bará, denunció el "mal estado" en el que están las infraestructuras ferroviarias de la comunidad y la falta de inversiones en los últimos años. "Tenemos un tren del siglo XIX", apuntó el político nacionalista, que avanzó que presentará en el Parlamento gallego nuevas iniciativas que urjan inversiones que "mejoren la red ferroviaria, apuesten por la conexión con Portugal a través de la salida sur y resuelvan el hecho de que el tren siga pasando por Porriño". "Tenemos un muy mal servicio ferroviario, en frecuencias y horarios y también en tiempos de viaje. Seguimos llegando antes en autobús que en tren", recalcó.

Los operarios de Adif ya están trabajando en el socavón de Arbo para tratar de solucionar los daños en la mayor brevedad de tiempo posible. Inicialmente anunciaron un corte en el servicio de al menos diez días, periodo que de demorarse algunas jornadas más trastocaría los planes de muchos pasajeros que ya tienen billete para viajar el fin de semana previo a Semana Santa.

Francisco Rodríguez - Tarragona

"Renfe no puede controlar el tiempo pero sí renovar la vía"

Ariadna López - Ourense

"Suelo echar en falta más información de las incidencias"

Beatriz Oliva - León

"Los empleados se portaron muy bien; la atención fue fantástica"

Roberto Ferreira - Logroño

"Es mucho más cómodo no tener que bajarse del convoy"