No se valora de forma cuantitativa ni aparece calificada en ningún boletín de evaluación al final de cada trimestre, pero es fundamental para el desarrollo intelectual del menor e influye de forma notable en otras competencias. Un total de 63 centros de Vigo iniciaron este curso múltiples proyectos en sus bibliotecas para favorecer la capacidad lectora del alumno y por consiguiente alentar su responsabilidad y aptitudes lingüísticas e investigadoras. "Un cuento les da pie a preguntarse por otras curiosidades; potencia una mezcla de conocimientos que no se imparten en una clase normal y sobre todo aprenden a comunicarse con los demás, ya que en las materias machacamos más la parte escrita y falta practicar la oral", señala la responsable de la iniciativa "Voluntariado de Lectura" en el CEIP Plurilingüe Sobreira-Valadares.
Los datos del último informe Pisa ponen de manifiesto los beneficios de esta práctica; la comunidad gallega obtuvo 10 puntos de mejora con respecto al informe anterior en competencia lectora y casi 15 en relación a la media española. Para afianzar esta tendencia positiva, la Consellería de Educación puso en marcha hasta ocho iniciativas dentro del Plan Lía para fomentar el trabajo y las aptitudes lingüísticas en las bibliotecas. Y no solo en las de los propios centros, sino también fomentar las relaciones entre colegios o incluso fuera de los recintos escolares.
Un ejemplo de ello se aspira en el colegio de Valladares, donde al amparo del programa "Bibliotecas Solidarias", los alumnos de 6º de Primaria recitan e incluso escenifican historias literarias en las guarderías de Monte Alba y Zamáns e incluso en la residencia de mayores a través del centro Cultural de Valladares. "Es un aprendizaje muy disfrutado primero porque cambian por completo su rutina y segundo porque pierden la vergüenza de hablar en público y de expresarse", señala la docente, quien valora por encima de todo la "responsabilidad" que comportan estas actuaciones. "Son voluntarios, por lo tanto el niño que se apunta debe saber que no puede faltar y que tiene una responsabilidad con el grupo. Realmente disfrutan tanto que siempre repiten. Por ejemplo, de 6º de Primaria contamos con todos los alumnos mientras que de 5º están apuntados 16 de 21", añade la coordinadora de la biblioteca escolar.
Esta responsabilidad no solo se traduce en la dramatización de las historias, sino también en el cuidado del recinto. Así, los 50 alumnos del tercer ciclo de Primaria del CEIP San Salvador se encargan, asesorados por un tutor, de realizar los préstamos en la biblioteca además de la catalogación de los depósitos y colocación de los ejemplares por secciones. "Durante el curso realizamos sesiones de formación, una vez al trimestre nos reunimos para explicares cuáles son las normas de funcionamiento. Así, en los recreos hacemos grupos de entre 4 y 5 alumnos que se encargan de estas funciones", admite el coordinador de la biblioteca de la CEIP San Salvador, donde el alumnado reserva 20 minutos diarios de este tiempo a la lectura.
Además de mejorar la comprensión lectora, el docente aprecia un gran progreso en cuanto a las "aptitudes plásticas y artísticas del menor". "A final de curso representan estas historias ante los más pequeños del centro o incluso estudiantes de Bachillerato, FP y de la ESO del IES de Teis intercambian libros de su biblioteca con la nuestra. Esta interacción favorece mucho la relación social de los niños", apunta el responsable.
Aunque no afecta de forma directa, esta dedicación especial a la lectura también se dejó notar, señala la Xunta, en la tasa de abandono escolar al cerrar el curso 2017 la marcar la tasa más baja de abandono educativo temprano desde que se dispone de recursos. Cada año, la Consellería convoca una línea de ayudas específicas destinadas a la actualización documental de las bibliotecas, además del mobiliario.
Los clubs de lectura son otro revulsivo para once centros educativos vigueses, así como otros proyectos coordinados por las bibliotecas (buscan promover cambios en el profesorado que faciliten la integración de nuevas tecnologías o prácticas educativas) o incluso el proyecto piloto de la "Radio en la Biblio".
