Los servicios mínimos han reducido el trabajo judicial al mínimo. Y es que aunque cada jurisdicción tiene sus obligaciones, lo cierto es que todo procedimiento civil, social, penal o contencioso que no requiera de plazos o urgencia no es tramitado y por lo tanto no se notifica a las partes. La justicia gratuita no es ajena a estas consecuencias.

La concesión de este servicio también se ha visto afectada por la falta de funcionariado cayendo de forma notable. Si bien hay que distinguir entre el tipo de solicitudes que se remiten al Colegio de Abogados.

Las solicitudes de justicia gratuita para todos aquellos que instan una demanda o una ejecución van a buen ritmo y no sufren retrasos; esta petición se tramita y se resuelve en plazo y sin problemas. Sin embargo, donde sí se ha producido un desplome en las solicitudes para contestar u oponerse puesto que con la huelga indefinida no se están notificado ningún tipo demanda al no ser tramitadas por los juzgados ni trasladadas por la oficina de reparto.

Lo que sí entra en la obligaciones de los servicios mínimos y es competencia de los abogados de oficio es la asistencia a detenidos. En este caso, el trabajo no se ha visto afectado ya que los juzgados de guardia operan dentro de la normalidad mientras que las salas que cuentan con un procedimiento con preso y tenían fijadas diligencias las llevaron a cabo.

Precisamente son las asistencias a detenidos las solicitudes más frecuentes de letrados de oficio. El año pasado sumaron un total de 2.515. En el cómputo global, durante el año 2017 fueron 7.517 el número de solicitudes estimadas. Habrá que esperar a la previsión de la huelga para determinar cómo afectará a los diferentes servicios judiciales.