La Dirección de la Estructura Organizativa de Xestión Integrada (EOXI) de Vigo da marcha atrás en su decisión de regular los cambios de turnos y de guardias que, habitualmente, acuerdan los trabajadores entre ellos. El revuelo creado por esta polémica medida, que desveló FARO, le ha llevado a descartarla. Ha llegado al acuerdo con los sindicatos de que todos estos movimientos pactados entre la plantilla se registrarán en los sistemas informáticos.
La Dirección de Recursos Humanos ya había presentado ante la comisión de centro el borrador de una instrucción dirigida al personal de Enfermería según la cual, entre otras cuestiones, impedía que se realizaran más de dos cambios al mes. Además, solo permitía cambios por el mismo número de horas y solicitados con 72 horas de antelación. Preparaba otro documento dirigido a los facultativos especialistas de área, por el que se acotarían estos intercambios a ciertas justificaciones.
La Dirección del área alegaba que con estos pactos no se registraba las horas efectivamente realizadas por cada trabajador y que, incluso, se habían producido casos de que se quedaba sin cubrir algún puesto por malos entendidos entre los trabajadores. El Sergas sostenía que el objetivo de las instrucciones que preparaba era conseguir "turnos lo más estables posibles y que la cartelera se cumpla" y alegaba "motivos legales, de orden y de condiciones".
La contestación de sindicatos y profesionales al anuncio de esta medida fue fuerte y se llegó incluso a amenazar con una huelga si se continuaba con ella. Las centrales explican que estos acuerdos entre profesionales facilitan la conciliación familiar, algo que resulta complicado con turnos rotatorios complejos.
El Sergas se conforma ahora con que se registren estos acuerdos entre empleados para disponer de la información real de las horas efectivamente trabajadas. Ya había servicios que estaban utilizando aplicaciones informáticas que permiten recoger estos datos y facilitan la labor de coordinación.
Esta medida se había anunciado poco después de que se restringieran las épocas del año y las condiciones en las que más de dos mil sanitarios del área pueden coger sus vacaciones. La Dirección impide a médicos de familia y pediatras de centros de salud, a enfermeras y matronas, a neumólogos, geriatras, internistas y médicos de urgencias reservar vacaciones para Navidad y solo les permite concentrar cuatro días de libre disposición en una de las tres semanas en las que divide estas fiestas.
