La Guardia Civil del Puerto lleva meses instalada en sus nuevas dependencias en El Tinglado, pero las obras que habilitaron el ala Este de esta edificación como almacén de carga general ya concluyeron sin nadie dispuesto a utilizarlas. A la Autoridad Portuaria le sorprende el desinterés de las empresas por ocupar 1.500 metros cuadrados de ubicación estratégica, en el muelle de Comercio, y contrasta con esa demanda de espacios por parte de los operadores de la que dice tener constancia.

Ante la evidencia, el Puerto descarta convocar un concurso que publicite la oferta de este local. Todavía confía en que aparezca una empresa con intención de convertirse en su inquilino. "El primero que se interese se lo queda", indican. Con la experiencia en este espacio, el Puerto ni se plantea impulsar la reforma del ala Oeste. Un espacio en estado lóbrego destinado desde hace un tiempo a sala de exposiciones.